El jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta afirmó que a partir del año que viene se implementarán las prácticas para que los adolescentes terminen sus estudios “con más herramientas” para poder “insertarse en el mundo del trabajo”.
El jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta confirmó que a partir del año que viene se implementará una nueva herramienta en el último año de los secundarios públicos y privados de la Ciudad de Buenos Aires. Se trata de una iniciativa que desde el Gobierno porteño quieren implementar hace tiempo: las prácticas educativas en ámbitos laborales.
A partir del ciclo lectivo 2022, el Gobierno porteño implementará estas prácticas de manera obligatoria en empresas y organizaciones a las que deberán asistir estudiantes que estén finalizando sus estudios en el colegio secundario. Según explicó Larreta esta mañana en una conferencia, el objetivo es que los adolescentes terminen sus estudios “con más herramientas” para poder “insertarse en el mundo del trabajo”.
Con esta intención, el jefe de Gobierno solicitó su apoyo al sector productivo, a las empresas, ONG y universidades que se involucren en este plan.
“En todo el mundo estamos viviendo un proceso de cambio, vinculado principalmente a la tecnología, que está revolucionando no solo nuestras vidas sino también la manera en la que trabajamos”, expresó el mandatario porteño.
“Tenemos que conectar a los chicos con el mundo y las herramientas que le despierten su vocación para que después puedan elegir su futuro en libertad”, agregó Larreta, afirmando que la intención es que los chicos “confíen en su potencial” y “sobre todo, en su país”.
Cómo serán las prácticas
- Las prácticas educativas en ámbitos laborales se pondrán en marcha para 29.400 chicos de 442 establecimientos educativos de gestión pública y privada
- Las prácticas educativas tendrán una duración de 120 horas cátedras que se distribuirán a lo largo del año.
- A diferencia de las pasantías, las prácticas laborales forman parte del diseño curricular de la Secundaria del Futuro y comenzarán el año próximo en coincidencia con la primera camada de alumnos de 5° año, desde su creación en 2018. Su desarrollo se llevará adelante en horario escolar y serán incluidas en el proceso de evaluación a cargo de los docentes.
Los estudiantes podrán sumar experiencias vinculadas a su orientación escolar en diversos ámbitos, divididos en 4 ejes:
- Sector productivo (privado o público).
- Sector de gestión de políticas públicas.
- Ámbito cultural/comunitario .
- Ámbito de la educación superior/científico-académico.
Las organizaciones que participen de estas actividades o estén interesadas en hacerlo con estudiantes de escuelas públicas, deberán formar parte del “sistema de inscripción para entidades y personas humanas comprometidas con la educación” y cumplir con todos los requisitos establecidos. Los establecimientos de gestión privada, en tanto, deberán establecer los convenios correspondientes.
La iniciativa no contempla a los 3 mil estudiantes de las 52 Escuelas Técnicas ubicadas en el territorio porteño —39 de gestión estatal y 13 de gestión privada— ya que las mismas implementan Prácticas Profesionalizantes en 5° y 6° año.
Rechazo de los gremios docentes
“Con esté programa están formando personas para un mundo del trabajo precarizado y están encubriendo el trabajo gratuito para la colaboración con empresas amigas”, dijo la secretaria general de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE), Angélica Graciano, en comunicación con AM750.
“Nosotros no queremos formar a nuestros estudiantes para la precarización laboral. Queremos formar a nuestros estudiantes para que se organicen, trabajen, conozcan el oficio y a su vez defiendan sus derechos. “, agregó.
Graciano señaló que la implementación de las prácticas laborales requieren de mucha inversión para solventar el trabajo del docente a cargo del programa, la renta del estudiante y el rol del formador que conoce el oficio y sin embargo alertó que el programa no está incluido dentro del presupuesto educativo 2022. “Una vez más vemos que a través de anuncios que aparecen como progresistas se filtran las recomendaciones de los organismos internacionales y el neoliberalismo en educación”, completó.
