¿Qué fue el blindaje financiero que hoy vuelve a proponer Patricia Bullrich?

Patricia Bullrich insinuó que de ganar las elecciones presidenciales volvería a pedirle al FMI un blindaje financiero, tal como hizo el Gobierno de Fernando de la Rúa. Bullrich fue clave para aplicar el ajuste que reclamaba el Fondo.

El blindaje financiero del año 2000 fue una negociación llevada adelante por el Gobierno de la primera Alianza, con Fernando De la Rúa a la cabeza, con el objetivo de robustecer las reservas del Banco Central para enfrentar vencimientos de deuda y, a su vez, seguir sosteniendo el modelo de la convertibilidad y la falacia del 1 a 1. Por entonces, pocos dirigentes dentro del sistema político consideraban posible abandonar el esquema ideado por el menemismo en pleno Consenso de Washington. Patricia Bullrich, en su rol de ministra de Trabajo, fue clave para aplicar un ajuste fiscal al recortarle los haberes a jubilados y jubiladas, tal como reclamaba el Fondo Monetario Internacional.

El ministro de Economía de entonces era José Luis Machinea. En febrero de 2000 se había firmado un préstamo stand by con el Fondo Monetario Internacional (FMI). El mundo vivía de crisis en crisis financiera. El tequila en México (1994), Asia (1997), Rusia (1998) y en Brasil (1999).

En pleno 2000, con dos años de estancamiento económico acumulados, las exportaciones agropecuarias no alcanzaban para robustecer las reservas del Banco Central. De hecho, muchos campos de pequeños productores pasaban a ser carne de cañón de los pools de siembra, sumado a los múltiples embargos del Banco Nación. La desocupación y la pobreza crecían día a día.

Sin muchas fuentes de financiamiento a la vista para sumar reservas en el Banco Central y aguantar los vencimientos por 20.000 millones de dólares que había por delante, la Alianza volvió a pedirle al FMI un blindaje.

El vicepresidente Carlos “Chacho” Alvarez renunció al gobierno en octubre de 2000. Ese fue el inicio de todas las negociaciones con el Fondo. Con la salida del vicepresidente, De la Rua reorganizó su gabinete. Entonces, entró en escena un personaje clave: Patricia Bullrich como ministra de Trabajo.

Cuando comenzaron los diálogos con el FMI, el negociador del gobierno era Daniel Marx, lo que podría decirse un “hombre de los mercados”. De todas maneras, su acercamiento con los burócratas del organismo y los funcionarios del gobierno norteamericano, no impidieron que el FMI bajase sus recetas clásicas, como condición para avanzar en cualquier nuevo préstamo.

Esas recetas son las mismas que se aplican en la actualidad: abrupto ajuste del gasto público y salir de la convertibilidad, lo que hoy podría entenderse como una devaluación. Por eso fue clave la presencia de Bullrich en el gabinete, garante del recorte del 13 por ciento en los haberes de jubilados y jubiladas.

Esas recetas son las mismas que se aplican en la actualidad: abrupto ajuste del gasto público y salir de la convertibilidad, lo que hoy podría entenderse como una devaluación. Por eso fue clave la presencia de Bullrich en el gabinete, garante del recorte del 13 por ciento en los haberes de jubilados y jubiladas.