Lo hizo en diálogo con C5N en donde también anunció su propuesta de un “blanqueo”, pero advirtió que aquellos beneficiarios que intenten evadir impuestos “irán presos”.
En la recta final de la campaña electoral, Sergio Massa aseguró que en caso de ser electo Presidente, se garantizará una supervisión equitativa del Banco Central con un 50% de representación de la oposición.
Lo hizo en diálogo con C5N en donde también anunció su propuesta de un “blanqueo”, pero advirtió que aquellos beneficiarios que intenten evadir impuestos “irán presos”.
Tras el acto por el Día de la Lealtad, el candidato presidencial reafirmó su aspiración de encabezar un “gobierno de unidad nacional” y destacó que la voluntad de involucrar a la oposición en la orientación de la política monetaria servirá como un “un símbolo del gobierno de unidad nacional”.
Massa planteó la idea de un “blanqueo” de activos no declarados, la “baja de impuestos” y el estímulo a la “crédito hipotecario”. En ese sentido, manifestó: “Hay millones de argentinos que tienen el deseo y la necesidad de recuperar el crédito hipotecario”. Aunque no entró en detalles acerca de la extensión de estas medidas, enfatizó que aquellos que eludan el pago de impuestos tras el proceso de regularización enfrentarán sanciones penales.
El actual ministro de Economía reafirmó sus diferencias respecto al presidente Alberto Fernández al expresar: “Creo que hay que hacer cambios, tengo la decisión de un cambio de rumbo, de un Estado presente pero eficiente”. Además, adelantó una medida que el presidente Fernández promulgará mediante decreto a su regreso de su gira oficial por China: “Vamos a sacar por decreto, cuando vuelva Alberto de China, la incompatibilidad en la pensión por discapacidad con el empleo”.
Esta modificación permitirá que las personas que reciben una pensión por discapacidad tengan la oportunidad de trabajar, en un esfuerzo por fomentar su inclusión en la sociedad. De la mano con ello, agregó: “Es la mejor forma de integrarlas e incluirlas en nuestra sociedad”.
El día en que se implementó la renuncia voluntaria a los subsidios para el transporte público, Massa argumentó que el propósito detrás de esta medida es mostrar a la ciudadanía las posibles consecuencias en caso de que prevalezca la postura de “la gente que dice que quiere eliminar el subsidio”.
“Lo que le decimos a la gente es claro: cuánto te va a costar el boleto de colectivo, de tren, sin el subsidio”, afirmó y añadió que “costará 700 o 1100 mangos el boleto de colectivo o tren”, señaló.
El ministro de Economía sostuvo que “es importante ser francos en el marco de la discusión de la campaña” y puntualizó que los subsidios son una forma de salario. “La medida tiene la intención de bajar a tierra lo que significa el subsidio en términos de salario indirecto”, resaltó Massa.
En lo que respecta al FMI, Massa afirmó que rediscutirá “el programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI) de manera integral”. “Cumpliremos y honraremos la deuda”, aseguró, “pero que no afecte salarios ni jubilaciones” pidió.