La iniciativa “Quédate en México”, impulsada por el ex mandatario, empieza a tener su fin, entre otros programas de migraciones totalmente discriminatorios y xenófobos.
Los demandantes de asilo obligados a permanecer en México mientras se resuelve su caso en Estados Unidos, comenzarán a ser admitidos en territorio estadounidense desde la próxima semana, anunció este viernes el Gobierno de Joe Biden.
A principios de febrero, Biden instruyó al Departamento de Seguridad Interior (DHS) que tomara acciones para poner fin al polémico programa Protección al Migrante (MPP en inglés) instaurado por su predecesor, Donald Trump.
Este acuerdo obligó a decenas de miles de inmigrantes en búsqueda de vivienda a permanecer en la frontera a la espera de la resolución de sus casos, lo que creó una crisis humanitaria en la zona, agravada por la pandemia de la Covid-19.
“A partir del 19 de febrero el DHS va a comenzar la fase uno de un programa para restaurar el procesamiento seguro y ordenado en la frontera”, anunció este organismo en un comunicado en el que detalló que comenzarán con las personas que han sido obligadas a permanecer en México bajo los acuerdos.
Para restablecer el proceso de personas en la frontera con México el DHS va a comenzar por tramitar los casos de unas 25 mil personas que estima que tienen casos activos bajo el programa MPP.
La ONG American Immigration Council estima que desde enero de 2019, cuando se empezó a implementar el programa, hasta diciembre de 2020, al menos 70 mil personas habían sido devueltas a México bajo los acuerdos MPP.
Las autoridades estadounidenses recalcaron que están trabajando de manera muy estrecha con el gobierno de México y con organizaciones internacionales y oenegés en la frontera.
Debido a la pandemia las personas que sean trasladadas a Estados Unidos van a ser sometidas antes a pruebas de coronavirus, especificó a la prensa un alto funcionario del DHS que pidió no ser identificado.