El Ejecutivo Nacional respondió al fallo del máximo tribunal y expresó que “resulta contra fáctico y no puede verificarse qué hubiera sucedido si el Gobierno Nacional no hubiera adoptado medidas a tiempo, ante la pasividad del Gobierno porteño”.
El Gobierno nacional declaró que ha sido elegido democráticamente “para adoptar las medidas que considera pertinentes para proteger la salud pública” y lamentó que la Corte Suprema de Justicia haya sostenido, “con inusitado rigor formal”, que las autoridades se basaron en “consideraciones meramente conjeturales con insuficiente fundamentación” para suspender las clases presenciales en CABA.
En un extenso comunicado en el que detalló las acciones desarrolladas desde el inicio de la pandemia, el Gobierno respondió al fallo del máximo tribunal y expresó que “resulta contra fáctico y no puede verificarse qué hubiera sucedido si el Gobierno Nacional no hubiera adoptado medidas a tiempo, ante la pasividad del GCBA (Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires)”.
“Con inusitado rigor formal, como si no estuviese en riesgo la salud pública y los derechos subjetivos que de ella derivan, como la vida, la Corte Suprema ha sostenido que, al suspender por quince días las clases presenciales en el conglomerado urbano del AMBA, el Gobierno Nacional se habría basado en ‘consideraciones meramente conjeturales’ con insuficiente fundamentación”, añade.
La declaración indica que “es un deber y un objetivo central de este Gobierno garantizar el derecho constitucional a la educación; y sabemos, sin ninguna duda, que este derecho se ejerce con mayor plenitud cuando se desarrolla en la modalidad presencial con docentes, niños, niñas y adolescentes en las aulas”.
Y señala que “al momento de dictarse el DNU (Decreto de Necesidad y Urgencia) cuestionado, el AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires) exhibía un crecimiento exponencial de contagios mayor al que presentaba el resto del país y el sistema de salud se hallaba fuertemente tensionado, con peligro de saturación” y “que también se ha verificado durante el año 2020 que la situación epidemiológica del AMBA se extiende a las demás regiones del país”.
La respuesta fue manifestada a través de un comunicado oficial mediante el departamento de comunicación.
Alberto Fernández y Cristina Kirchner también se expresaron públicamente acerca del fallo de la Corte
El presidente Alberto Fernández sostuvo que seguirá “cuidando de la salud de los argentinos y argentinas por más que se escriban muchas hojas en sentencias”, luego de que se conociera el fallo de la Corte Suprema de Justicia respecto del Decreto de Necesidad y Urgencia que suspendía la presencialidad escolar en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) para mitigar la pandemia de coronavirus.
Al encabezar el acto de presentación del Plan “Juana Manso”, que buscará dotar de conectividad a miles de estudiantes de todo el país, el jefe de Estado criticó “la decrepitud del Derecho” al aludir al fallo del máximo tribunal argentino en favor del reclamo de inconstitucionalidad planteado por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Las palabras de Fernández se hicieron sentir minutos después de conocida la sentencia, en el marco de un acto en el que se presentaba la reactivación de una política educativa iniciada en el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner bajo el nombre de “Conectar Igualdad” y que fuera desfinanciada y discontinuada durante la administración de Mauricio Macri.
Fernández dijo ser una persona que reivindica el “Estado de Derecho”, que respeta las “sentencias” pero, al mismo tiempo, subrayó su voluntad de “seguir cuidando la salud de los argentinos” más allá de los fallos judiciales.
“No saben lo que me apena ver la decrepitud del derecho convertido en sentencias. Es el tiempo que me ha tocado, también deberemos luchar contra eso. Lo que tenemos que hacer es estar más unidos que nunca”, dijo casi sobre el final de su discurso.
Previamente, había destacado la importancia del nuevo plan de conectividad educativa en términos de “criterios de igualdad”: “El mérito existe, pero para que valga, exige que todos partan del mismo punto de partida”.
Con una inversión estimada de 20 mil millones de pesos, el Plan Federal Juana Manso entregará 633 mil netbooks a estudiantes de escuelas secundarias de todo el país para darles acceso a la conectividad.
Según se informó oficialmente, la primera entrega de 80 mil equipos se realizará en julio próximo y continuará con distribuciones cada 30 días.
La prioridad la tendrán los establecimientos con alumnos que han tenido baja o nula continuidad pedagógica en 2020 y la distribución comenzará en aquellas provincias de menor nivel socioeconómico, y con mayor porcentaje de estudiantes desvinculados.
La fabricación de las netbooks generará 2000 puestos de trabajo y se llevará a cabo en plantas ubicadas en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Rosario y las provincias de Tierra del Fuego y de Buenos Aires.
La presentación del Plan tuvo -por ello- una arista dedicada a la producción nacional y Fernández, en ese sentido, realizó un paralelismo con las políticas de reactivación anunciadas días atrás por el presidente estadounidense Joe Biden, a quien aludió como “Juan Domingo”, en referencia a la similitudes con el pensamiento peronista.
Así, el mandatario nacional calificó como “formidables” las palabras de su par norteamericano cuando planteó el refuerzo de los cuidados contra el coronavirus mientras lanzaba “el mayor programa de empleo” a través de la apuesta a la “obra pública” y el “compre nacional”.
“Cuando decimos que ponemos en marcha este plan, lo hacemos construyendo estas computadoras en ocho empresas argentinas, que nos van a dar 700 mil notebooks”, señaló.
Por su parte, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner aseguró este martes que “los golpes contra las instituciones democráticas elegidas por el voto popular ya no son como antaño”, al referirse al fallo de la Corte Suprema de Justicia que avaló el planteo del Ejecutivo porteño contra el DNU que suspendió las clases presenciales en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y reivindicó la “autonomía” del distrito.
“Hoy, la Corte acaba de decidir, en plena pandemia decretada por la OMS, emergencia sanitaria sancionada por el Congreso de la Nación y con más de 65.000 muertos en la Argentina, que el Poder Ejecutivo Nacional no tiene competencias para tomar medidas sanitarias”, dijo la vicepresidenta en un hilo publicado a través de su cuenta en Twitter.
“Ante este escenario, digo yo… para poder gobernar ¿No será mejor presentarse a concursar por un cargo de Juez al Consejo de la Magistratura o que un Presidente te proponga para Ministro de la Corte?”, se preguntó.
En esa línea, sentenció: “Sinceramente, está muy claro que los golpes contra las instituciones democráticas elegidas por el voto popular, ya no son como antaño”.
La Corte Suprema de Justicia de la Nación falló a favor del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) en la demanda contra el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 241/2021 que, como una de las medidas sanitarias para mitigar la expansión de la segunda ola de coronavirus, determinó la suspensión de las clases presenciales en el AMBA.
En su resolución, el máximo tribunal concluyó que “se violó la autonomía” de la Ciudad en el artículo 2 del DNU 241/2021, cuya vigencia finalizó el viernes último pero cuyo objeto fue prorrogado con otra norma, el DNU 287/2021, que dispuso que en las zonas bajo “alerta epidemiológica y sanitaria” por la pandemia de coronavirus, las clases sean dictadas “exclusivamente a distancia” en todos los niveles educativos hasta el próximo 21 de mayo.