El ex primer ministro italiano y líder del partido Forza Italia, Silvio Berlusconi, murió hoy a los 86 años.
Silvio Berlusconi, fue una figura controvertida en la política italiana, y ha dejado una marca indeleble en la historia reciente de Italia, convirtiéndose en una de las figuras políticas más destacadas y divisivas del país durante las últimas décadas.
Antes de ingresar a la política, Berlusconi fue un exitoso empresario y magnate de los medios de comunicación. Fundó su propia compañía, Mediaset, que se convirtió en uno de los conglomerados de medios más grandes de Italia. Su éxito en los negocios le proporcionó una inmensa fortuna personal y una amplia influencia en el ámbito mediático.
Berlusconi hizo su entrada en la política italiana en la década de 1990 cuando fundó su propio partido político, Forza Italia. Aprovechando su popularidad y la exposición mediática que le brindaba su imperio mediático, Berlusconi logró convertirse en el primer ministro de Italia en cuatro ocasiones diferentes, ocupando el cargo desde 1994 hasta 1995, de 2001 a 2006 y de 2008 a 2011.
Durante su tiempo en el poder, Berlusconi implementó una serie de reformas económicas y sociales, aunque su mandato estuvo plagado de controversias y escándalos.
La personalidad extravagante y carismática de Berlusconi también lo hizo objeto de atención mundial. Sus comentarios controvertidos y su estilo de vida ostentoso le granjearon tanto seguidores apasionados como críticos fervientes. Además, su vida privada también fue objeto de escrutinio público, con numerosos escándalos con sus diferentes parejas y con infidelidades de por medio.
Sin embargo, a pesar de sus polémicas, Berlusconi mantuvo un gran apoyo popular en Italia.
El italiano falleció hoy a sus 86 años, a causa de una leucemia, pero sin dudas, para bien o para mal, será una personalidad recordada en la política mundial.