La producción fabril se ubicó 5,6% por encima de la de julio de 2019 y 3,8% por arriba de la de 2018.
La industria escaló más de 5% en julio contra el mismo mes del año previo a la pandemia e incluso casi 4% por encima del nivel que había registrado en 2018.
Este impulso se retroalimenta con un clima de inversión, que en el primer semestre les abrió la puerta a anuncios por más de U$S 17.000 millones en el país. Si bien el sector impulsa con fuerza a la economía, mantiene sus heterogeneidades y en su conjunto cedió 2,6% respecto al mes anterior.
En julio, la producción industrial fue 5,6% mayor a la de julio de 2019. Incluso fue 3,8% mayor a la de julio de 2018. Incluso diez de las 16 categorías manufactureras produjeron por encima del último año macrista: maquinaria y equipo, automotriz, químicos, materiales de construcción, caucho y plástico, y alimentos registraron los más sustanciales aumentos.
Con el gobierno del expresidente de Cambiemos, las fábricas perdieron puestos de trabajo en 46 de 48 meses. “Fue un verdadero industricidio”, calificó por redes sociales el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas. En la actualidad van 13 meses seguidos de crecimiento y la industria emplea hoy a 24.000 trabajadores más que en 2019.
La mejoría también se observa en el ámbito de decisiones de los empresarios y las perspectivas de futuro. En el primer semestre se acumularon 103 anuncios de inversión por U$S 17.324 millones, lo que implica un 580% más que en el mismo período de 2020.
De estos, 67 fueron lanzados en el segundo trimestre y por U$S 15.201 millones. Estos desembolsos no sólo involucran a empresarios nacionales sino también que provienen de compañías de Alemania, Bélgica, Brasil, Canadá y otros doce países, de acuerdo a un reporte del Ministerio de Producción de la provincia de Buenos Aires.
La mayoría de los anuncios del segundo trimestre se destinaron al sector de la construcción, pero también al minero y en menor medida al de la industria manufacturera e información y comunicación.
El territorio bonaerense acapara más de la mitad del monto total, particularmente los provenientes de sociedades argentinas, chinas, españolas, holandesas e irlandesas.
El sector de la construcción estuvo 8,6% por encima del promedio de 2019, de acuerdo al INDEC. De este modo, alcanzó valores de mediados de 2018, cuando comenzó la crisis económica del macrismo, que fue generada por el mega endeudamiento y la posterior corrida cambiaria.
El empleo formal en la construcción mejora mes a mes, tras haberse desplomado con la crisis de 2018-2019 y los primeros meses de la pandemia. Este lleva once meses de crecimiento consecutivo, a un ritmo de alrededor de 5.000 empleos por mes.