Juntos por el Cambio y aliados consiguieron cambiar la actual legislación y el proyecto pasa al Senado. El oficialismo cosechó solo 109 votos y no avanzó. Antes, fracasó la derogación que impulsaba Javier Milei. El diputado libertarios se enojó y se fue.
La Cámara de Diputados de la Nación sancionó este miercoles el proyecto que reforma la ley de alquileres, propuesta impulsada por Juntos por el Cambio y bloques de la oposición. La propuesta del Frente de Todos había sido rechazada minutos antes. La sesión inició con los legisladores del principal interbloque opositor en alianza con el diputado y precandidato a presidente por La Libertad Avanza en estas elecciones 2023, Javier Milei.
El proyecto de la oposición, que reduce el plazo de los contratos de 3 a 2 años y establece que la actualización de los montos pueda ser cada cuatro meses en base a un índice pactado entre las partes, fue aprobado por 125 votos a favor, 112 en contra y 3 abstensiones. En cambio, el del Frente de Todos cosechó 109 a favor y 131 en contra. Ahora, la propuesta de modificaciones a la ley sancionada en 2020, deberán ser tratados en el Senado.
En el comienzo de la sesión, Milei mostró su enojo cuando el Congreso rechazó su proyecto para derogar la normativa. Claramente molesto por la situación, se levantó de su banca y junto a su candidata a vice, Victoria Villarruel, dejaron sus puestos de trabajo en el recinto. Finalmente, los dos libertarios votaron en contra de los dos expedientes.
La sesión comenzó pasadas las 12 y fue convocada por las autoridades de la Cámara baja el jueves pasado a partir de un pedido realizado por el presidente del bloque de la Unión Cívica Radial, Mario Negri, al que se plegaron sus pares de Juntos por el Cambio, el Interbloque Federal, un bloque de Provincias Unidas y La Libertad Avanza, tras haber fracasado en la última sesión -el 5 de julio pasado- en el intento del PRO de derogar el texto actual de la norma.
Para conseguir el quórum, la oposición reunió 129 diputados con el aporte de Juntos por el Cambio; Córdoba Federal, Identidad Bonaerense, Interbloque Federal; Ser -que integra el gobernador electo de Santa Cruz Claudio Vidal-, Juntos por Río Negro y La Libertad Avanza.
“Lo que nosotros planteamos es una serie de incentivos para poder aumentar el stock de viviendas en alquiler sin derogar la Ley de Alquileres, sumando entre otros puntos que el precio del contrato se fije en moneda nacional”, afirmó el jefe de la bancada del Frente de Todos, Germán Martínez. En la misma linea, el diputado Carlos Heller indicó que “legislar es proteger al más débil y eso es lo que tenemos que hacer”.
El oficialismo proponía sostener los pilares centrales de la actual ley con los tres años de duración de los contratos y la actualización anual de los precios en base a indicadores fijos como el IPC y el RIPTE. La única novedad es que incorporaba una serie de incentivos fiscales para los propietarios, de modo tal de estimular la oferta de inmuebles en alquiler y paliar el fenómeno que se viene dando aceleradamente de retiro de viviendas del mercado.
Por otra parte, la diputada del bloque Identidad Bonaerense Graciela Camaño opinó que “no hay una resolución definitiva de este problema, lo único que nos proponemos es intentar mejorar la oferta del alquiler porque indudablemente esta ley no fue pensada para una Argentina con inflación”.
Desde el bloque de Juntos por el Cambio, el diputado radical Alejandro Cacace afirmó que etán “dando mecanismos para que se pongan más propiedades en alquiler” ya que no quieren “contribuir a que la ley siga como está; y por eso venimos hoy acá al recinto a cambiarla”.
Mientras que el diputado nacional de Avanza Libertad José Luís Espert opinó que “el efecto de la Ley de Alquileres ha sido devastador, y tiene descontento tanto a propietarios como inquilinos, no le tengamos miedo a la libertad de la gente, dejemos que la gente pacte libremente sus contratos”.
Finalmente, la diputada del Frente de Izquierda y los Trabajadores Myriam Bregman explicó que “el problema es que los cambios que aquí se proponen, ya sea la derogación o lo que está en el dictamen de minoría, son perjudiciales a quienes alquilan”.
El dictamen de minoría impulsado por Juntos por el Cambio que terminó con la media sanción es bastante más laxo en las condiciones contractuales, fijando dos años de plazo e indexación en base a indicadores que acuerden libremente las partes.
En la iniciativa, se estipula que “en los contratos de locación de inmuebles con destino a uso habitacional, el precio del alquiler debe fijarse como valor único y por períodos mensuales, sobre el cual podrán realizarse ajustes con la periodicidad que acuerden las partes y por intervalos no inferiores a 4 meses”.
En tanto, “para los ajustes, las partes deberán convenir el mecanismo de actualización del precio del alquiler al inicio de la relación locativa, pudiendo aplicar a tales efectos el índice de precios al consumidor (IPC), el índice de precios mayoristas (IPM) y/o el índice de salarios (IS), elaborados por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) o una combinación de dichos índices, según las partes acuerden”.
En relación a los beneficios fiscales, se contempla una reforma del régimen de monotributo para que quienes tengan tres unidades de explotación, “en el caso de la actividad de locación de inmuebles, mediante contratos debidamente registrados” se considere como “una sola unidad de explotación independientemente de la cantidad de propiedades afectadas a la misma”.
Por otra parte, se exime de Bienes Personales a los inmuebles destinados a alquiler y contempla una modificación al impuesto a los débitos y créditos bancarios, para que estén exentas aquellas cajas de ahorro o cuentas corrientes “utilizadas en forma exclusiva para las operaciones inherentes a la actividad de locación de inmuebles con destino casa-habitación, cuyos contratos se encuentren debidamente registrados”.