El 2 de enero comenzó el juicio a los ocho rugbiers acusados por el crimen de Fernando Báez Sosa, el joven de 18 años asesinado a golpes en enero de 2020 a la salida de un boliche de Villa Gesell.
Comenzó la tercera del juicio, la misma que marcará el tercer aniversario del asesinato. Alejo Milanesi y Juan Pedro Guarino, los rugbiers sobreseídos en la causa por el crimen de Fernando Báez Sosa en Villa Gesell, declarancomo testigos en el juicio oral que enfrentan sus ocho amigos, con quienes vacacionaban cuando cometieron el brutal ataque.
Los dos testigos fueron parte del grupo que está preso por el crimen de Fernando Báez Sosa. Pero este lunes se sentaroncon la obligación de contar lo que vieron y escucharon, ya que son dos testigos clave del juicio que se sigue en los Tribunales de Dolores. Precisamente, los dos jóvenes estuvieron detenidos unos días hasta que la investigación los dejó fuera de sospecha, debido a que las pruebas no alcanzaron para involucrarlos en la golpiza que el resto del grupo de rugbiers propinó a Fernando Báez Sosa el 18 de enero del 2020.
Milanesi y Guarino fueron testigos propuestos por la defensa de los ocho rugbiers. Sin embargo, a la hora de declarar deben responder las preguntas del particular damnificado, es decir todas aquellas que precisen hacer los abogados que representan a la familia del joven asesinado y el fiscal Juan Manuel Dávila. Esto se debe a que, en su calidad de testigos están comprometidos a declarar lo que vieron y escucharon de ese día y los posteriores.
Guarino incriminó a sus amigos
En una explosiva declaración, uno de los dos rugbiers sobreseídos, Juan Pedro Guarino, complicó a los ocho acusados por el crimen de Fernando Báez Sosa, particularmente a Máximo Thomsen, Luciano Pertossi y Ciro Pertossi. El joven que había estado bajo la mira durante la primera etapa del proceso dijo que los imputados se habían peleado ya tres veces en la ciudad balnearia.
“Imaginé que iban a pelearse de vuelta y no lo podía creer”, subrayó. Además, identificó a Thomsen, sobre el que dijo que “era” su amigo, como uno de los agresores de Fernando cuando ya estaba tirado en el piso.
“Veo a Máximo Thomsen y a un chico tirado en el piso que después me entero de quien era. Me lo entero al otro día y cuando vi eso no lo podía creer me enojé muchísimo y me fui”, aseguró.
“Vengo a ayudar a la Justicia”, dijo Juan Pedro Guarino al llegar a Dolores. El rugbier sobreseído habló brevemente con los periodistas en la puerta del juzgado. Fue ante la repregunta de a quien venía a ayudar que el joven aclaró que desea “ayudar a la Justicia”. Mientras que, unos segundos antes de ingresar a la zona delimitada por un vallado, expresó: “Justicia por Fernando”.