Sebastián Waisgrais, especialista de monitoreo e inclusión social de Unicef, contó que hay “10 millones de chicos que comen menos carne”.
Sebastián Waisgrais, especialista de monitoreo e inclusión social de Unicef, advirtió este martes que la Argentina tiene “los mismos niveles de pobreza de 2001”. Esta declaración se dio horas después de que el organismo de las Naciones Unidas para las infancias revelara que millón de chicos se va a dormir sin comer en Argentina.
“Venimos realizando estudios vinculados a la pobreza y alertando sobre problemas estructurales y crónicos”, contó Waisgrais en diálogo con El Destape 1070, y siguió: “La situación de los ingresos de los hogares se fue deteriorando y llegamos a este dato. Antes mirábamos los que se salteaban una comida y ahora directamente los que se van a dormir son cenar. Son un millón de chicos que no están cenando, y si sumamos a los que se saltean una comida son un millón y medio”.
Además, el especialista de monitoreo e inclusión social de Unicef declaró: “Tenemos un problema histórico. En los últimos años ha ido empeorando. En el último trimestre, el deterioro es más significativo: los hogares se endeudan, piden fiado, dejan de ir al médico, se bajan de un seguro médico. Empiezan a haber muchísimas restricciones que terminan con la falta de plato de comida en la mesa. Y el problema también es en adultos, que dejan de cenar para que coman los chicos”.
“Hay 10 millones de chicos que comen menos carne. Lo que se está consumiendo son harinas. No solamente tenemos un problema de hambre sino también de malnutrición. Las secuelas son graves”, continuó e insistió: “Esta pobreza se está heredando de generación en generación. Tenemos los niveles de pobreza de 2001. Si no tuviésemos la AUH, la indigencia estuviera 10 puntos por arriba”.
Datos de Unicef sobre la pobreza en el primer cuatrimestre revelaron que “más de un millón de chicos se va a dormir sin comer en Argentina”. El informe del organismo supranacional precisó que en Argentina hay “3,3 millones de hogares en donde viven casi 7 millones de chicas y chicos”, y que “un 90% dejó de comprar leche, carnes y otros lácteos”, mientras que “más de 1 millón de chicas y chicos tuvieron que saltearse una comida diaria (desayuno, almuerzo, merienda o cena) por falta de dinero (7,4% del total). Entre las personas adultas, esta situación es aún más severa: un 30% tuvieron que saltearse una comida”.
Además, Unicef reveló que, en el primer cuatrimestre de este año, un 52% de los hogares debió dejar de comprar algún alimento por falta de dinero, lo que representa una suba de 11 puntos porcentuales por sobre el mismo período de 2023. Asimismo, un 23% tuvo que dejar de comprar algún medicamento y un 32% debió reducir controles médicos u odontológicos.