Según la Multisectorial Humedales, en los últimos días se vieron afectadas unas 7.000 hectáreas producto de incendios ilegales en diferentes zonas del delta.
El Servicio Nacional de Manejo de Fuego (SNMF) hizo un balance sobre los incendios activos en todo el país y destacó que, por el momento, las provincias de Entre Ríos y Catamarca son las únicas afectadas por las llamas, sin embargo, aclaró que el fuego se extinguió en el departamento catamarqueño de Tinogasta.
El reporte del organismo que depende del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, indicó que el fuego en Catamarca está localizado en Andalgalá. En Entre Ríos, el foco activo se encuentra en la zona de Gualeguay I, mientras que los incendios registrados en Gualeguay II fueron “controlados”.
Señaló, además, que los focos ígneos que se desarrollan en las localidades cordobesas de Colón, Punilla y Santa María fueron “controlados”. En La Rioja, los incendios detectados en los municipios de Ángel Peñaloza y Chilecito se encuentran “contenidos”.
Para combatir el fuego en Catamarca, el organismo envió un helicóptero con helibalde, también destinado para traslado de personal, y un avión hidrante. En Entre Ríos, se encuentra operativo un helicóptero con helibalde y para traslado de personal y un avión hidrante, subrayó el organismo.
Los focos de incendio se están detectando gracias a la Red de Faros de Conservación del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, ubicado sobre Villa Constitución, en la provincia de Santa Fe.
Las alertas del Sistema de Monitoreo y Alerta Temprana de Incendios de la cartera ambiental nacional se compone de torres de entre 30 y 40 metros de altura, sobre las que se colocaron cámaras multiespectrales que detectan humo y calor. A través de un software se detectan y localizan los focos de incendio y dos centros de monitoreo reciben y analizan las alertas para reenviarlas a las provincias para la extinción del fuego.
Según la Multisectorial Humedales, en los últimos días se vieron afectadas unas 7.000 hectáreas producto de incendios ilegales en diferentes zonas del delta; y en lo que va del 2022 se registraron unos 4.500 focos ígneos en 60.000 hectáreas de la región, indicaron.