La Vicepresidenta apuntó contra “la mafia mediática-judicial” y cuestionó la doble vara de la Justicia respecto a las escuchas ilegales.
La vicepresidenta, Cristina Kirchner, denunció este viernes a “la mafia mediática-judicial” y pidió ser sobreseída por la Cámara de Casación en la causa Memorándum con Irán por haberse basado en escuchas ilegales, dado que ese mismo criterio se utilizó para no avanzar con la denuncia contra la mano derecha de Horacio Rosatti, Silvio Robles.
“La mafia mediática-judicial, la impunidad y el absurdo jurídico a cielo abierto. Es hora de despabilarse y advertir que están conduciendo a las instituciones hacia un callejón sin salida”, afirmó la exmandataria en un hilo de su cuenta de Twitter.
Cristina recordó que “en el año 2016 en Comodoro Py los Camaristas de Casación Hornos y Borinsky reabrieron la causa Memorándum con Irán, que había sido sobreseída… ¡2 veces!”, y remarcó que esta reapertura se fundamentó “en ‘una escucha ilegal’, metieron preso a Zannini y le prohibieron a Timerman tratarse de un cáncer en EEUU”.
“Después de la legalización de la escucha, Macri -que era presidente- felicitó públicamente a Hornos y Borinsky y criticó a la otra camarista, Ana María Figueroa, que había votado en minoría contra esa decisión”, añadió la Vicepresidenta.
Acto seguido, señaló que “ahora en 2023, el Juez Ramos de Comodoro Py en 20 días rechazó la denuncia contra Silvio Robles, que arreglaba fallos de la Corte en chats con D’Alesandro (sic), Mtro. de Seguridad CABA, diciendo que no podía ser imputado de delito porque la denuncia se apoyaba en ‘una escucha ilegal'”.
De este modo, apuntó a la doble vara del Poder Judicial, que permitió reabrir la causa Memorándum con Irán hace siete años en base a una escucha ilegal, pero que argumentó que por basarse también en una escucha ilegal no debía avanzarse con la causa por posible tráfico de influencias contra Robles y D’Alessandro.