El Presidente dio un discurso después de la decisión que comunicó el domingo y elogió a Kamala Harris, a quien apoyó para que lo suceda.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, explicó las razones porque las que se retiró de la carrera por la reelección y sostuvo que una “ambición personal” no podría anteponerse a “salvar” la democracia de su país.
“Creo que mi historial como presidente, mi liderazgo en el mundo y mi visión para el futuro de Estados Unidos, todo justificaría un segundo mandato, pero nada puede interponerse en el camino de salvar nuestra democracia. Eso incluye la ambición personal”, dijo el Presidente en su primer discurso público después del anuncio del domingo pasado.
Agradeció a la gran “compañera” que es Kamala Harris como vicepresidenta y a quien dio su apoyo para que se presente como candidata a la presidencia. “Es experta, es capaz y una gran líder del país”, definió el presidente demócrata y señaló que es tiempo de un traspaso generacional. “Hay que pasar la antorcha a las nuevas generaciones, esa es la mejor forma de unir nuevas voces, voces frescas y jóvenes y ese momento es ahora”, sostuvo Biden desde el despacho Oval.
Si bien las campañas presidenciales de Biden y del ex presidente Donald Trump bajaron varios tonos después del intento de asesinato del republicano, el actual presidente sostuvo que su corrimiento también respondió a la necesidad de “salvar la democracia” que consideró que se encuentra en un “punto de inflexión”. “No es sobre mi, es sobre el futuro de América. Hay que elegir si quieren ir para adelante o para atrás”, describió Biden y dijo que buscará “unir” al Partido Demócrata para asegurar su continuidad en el poder.
Biden dijo que en los seis meses que le quedan de gobierno se enfocará en hacer crecer la economía, en defender los derechos civiles y políticos: “a elegir y votar en libertad”, y enfatizó en que trabajará para erradicar todo tipo de violencia. En el plano internacional, dijo que se concentrará en buscar la paz en la Franja de Gaza asediada por Israel desde el 7 de octubre del año pasado y tratará de conseguir la libertad de todos los rehenes. “La historia y el poder está en sus manos. Mantegan la fe y recuerden quiénes somos”, cerró.
El Partido Demócrata de Estados Unidos usó las últimas 72 horas para reacomodar todas sus fichas en torno a la vicepresidenta Kamala Harris y las elecciones del próximo 5 de noviembre. En su camino a la Casa Blanca para ocupar el máximo cargo de la potencia mundial, Harris obtuvo una recaudación récord para su campaña, el respaldo de las dos principales figuras del partido en el Congreso y la cantidad de delegados necesarios para confirmar su candidatura en la Convención Nacional Demócrata dentro de un mes. Es más, trabajan para llevar a cabo una votación virtual, para que el encuentro de agosto sea meramente formal. El presidente, Joe Biden, se recuperó y ya anunció un discurso para este miércoles a la noche.
El éxito de la candidatura de Harris -al menos, hacia adentro del partido-, comenzó a cerrarse este martes con el apoyo de los dos principales líderes demócratas: el presidente de la banca del Senado, Chuck Schumer; y el de la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries. “Cuando hablé con ella el domingo, dijo que quería tener la oportunidad de ganar la nominación por su cuenta y hacerlo desde la base hacia arriba, no desde arriba”, dijo Schumer. “Ahora que el proceso se ha desarrollado desde la base, de abajo hacia arriba, hoy estamos aquí para brindar nuestro apoyo a la vicepresidenta Kamala Harris”, dijo en una conferencia de prensa, según reportó la CNN.