El creador de la revista “Cerdos y Peces” y monologuista de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota fue uno de los que inauguró una nueva etapa del periodismo argentino durante el retorno a la democracia.
El periodista y escritor Enrique Symns falleció este jueves a los 77 años. Fue secretario de redacción de la revista El Porteño y en 1983 fundó la revista Cerdos y Peces, una de las publicaciones míticas de la primavera democrática.
Nacido en Lanús en 1945, vivió en Brasil y Europa antes de volver a la Argentina para sumarse a El Porteño. Se especializó en la cultura under y desarrolló un estilo más exacerbado del Nuevo Periodismo, el llamado “periodismo gonzo”, que tenía como gran figura en Estados Unidos a Hunter Thompson.
Cerdos y Peces conitnuó hasta 1987 y después tuvo reediciones esporádicas. En 1989 pasó por el diario Sur. En los 90 escribió en la revista La Maga. Radicado en Chile en los primeros años de este siglo, escribió allí en la revista The Clinic. En 2003 regresó al país y publicó su atobiografía, El señor de los venenos, además colaborar con varias publicaciones. Sus crónicas de Cerdos y Peces se recopilaron en el volumen Invitación al abismo.
Symns estuvo ligado a la escena del rock, que comenzó a florecer de manera masiva mientras se derrumbaba la dictadura. Acompañó a los Redonditos de Ricota en sus primeros años. Actuó como monologuista en los shows de la banda, antes del salto a la popularidad del grupo liderado por el Indio Solari.
El periodista rompió todo vínculo tras la muerte de Walter Bulacio a manos de la Policía Federal, en 1991. Symns cuestionó a la banda y aseguró que los músicos se desentendieron de la suerte corrida por el adolescesnte de 16 años golpeado por los uniformados la noche de un recital de los Redondos en Obras.
“Yo no debí acusarlos. No era un juez ni un maldito policía, era un periodista. Es decir un reconstructor de escenas, un antropólogo de la vida cotidiana. Hoy en día casi todos los periodistas son policías, jueces, espías. No dudan de hacer espionaje, de acusar a sus enemigos, de violentar la intimidad de quienes execran”, escribiría años más tarde sobre el tema.
También estuvo cercano a otras bandas, como Los Piojos, Los Caballeros de la Quema y Bersuit Vergarabat.
La obra de Symns es extensa. En su bibliografía se pueden mencionara La última canción (biografía de la banda chilena Los Tres); Páez (sobre Fito Páez); la antología La vida es un bar; En busca del asesino y Big Bad City.
También firmó monólogos como Una noche perfecta, La pecera envenenada, Una noche perfecta y Relatos de un hombre extraviado: 64 años bajo el sol.