Fundación de Patricia Bullrich: Movimientos irregulares y sospechas de corrupción

La Inspección General de Justicia (IGJ) busca avanzar contra la ONG presidida por la líder del PRO

En los últimos días, se han detectado una serie de movimientos irregulares en la fundación de Patricia Bullrich, el Instituto de Estudios Estratégicos en Seguridad (IEES). Estos movimientos han brotado la preocupación y han llevado al cuestionamientode su transparencia y la legalidad de las actividades de la fundación.

El Instituto de Estudios Estratégicos en Seguridad es una organización sin fines de lucro que fue creada en 2018 por Patricia Bullrich, ex ministra de Seguridad de la República Argentina. El objetivo del IEES es “promover el estudio, la investigación y la difusión de conocimientos en materia de seguridad pública y defensa nacional”. Para lograr este objetivo, la fundación lleva a cabo diversas actividades, como la organización de seminarios, la publicación de investigaciones y la formación de expertos en seguridad.

Sin embargo, en los últimos días, se han revelado una serie de irregularidades en las actividades del IEES. En primer lugar, se ha cuestionado la falta de transparencia en la financiación de la fundación. Según ha trascendido, el IEES ha recibido fondos de empresas privadas y de donantes anónimos, lo que ha generado sospechas sobre posibles conflictos de interés y la posible influencia de estos donantes en las actividades de la fundación.

Además, se ha denunciado la falta de rigor y la falta de independencia en las investigaciones llevadas a cabo por el IEES. Según algunos expertos, las investigaciones realizadas por el IEES han sido tendenciosas y han sido utilizadas para apoyar las posiciones políticas de Patricia Bullrich y su partido, el PRO. Esto ha llevado a cuestionar la credibilidad y la objetividad de las investigaciones realizadas por la fundación.

Así, la Inspección General de Justicia (IGJ) resolvió este lunes “intervenirla judicialmente” por haber “estructurado un sistema de ingresos y egresos” destinado a “financiar” acciones de “proselitismo político” a través de “seminarios, almuerzos y/o aportes”.

En este marco, el director de entidades civiles de la IGJ, Guillermo Echeverría, explicó que en 2019 el IEES realizó un cambio de objeto social orientado casi específicamente al estudio de la seguridad, el crimen y el cibercimen.

“Pero los ingresos de la asociación civil distan de estar vinculados al objeto social, porque en 2019 el instituto tuvo un ingreso por 741 pesos y el 2022 termina con 90 millones“, afirmó en diálogo con AM750.

“Este crecimiento exponencial se experimenta por la realización de unos supuestos seminarios y coincide con las noticias que relacionan a Patricia Bullrich y los cobros a empresarios de almuerzos que eran fondos para su campaña y esos ingresos los realizaba a través del instituto”, agregó.

Otra de las irregularidades que se han detectado en la fundación de Patricia Bullrich es la falta de cumplimiento de las normativas y los requisitos legales para el funcionamiento de una organización sin fines de lucro. Según ha trascendido, el IEES no habría cumplido con la presentación de informes anuales y con la inscripción en los registros correspondientes, lo que ha llevado a la apertura de una investigación por parte de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP).

Ante estas irregularidades, la fundación de Patricia Bullrich ha emitido un comunicado en el que defiende su transparencia y su legalidad, y asegura que está dispuesta a colaborar con las investigaciones que se están llevando a cabo. Sin embargo, la opinión pública ha expresado su preocupación y su desconfianza hacia la fundación, y ha pedido una mayor transparencia y un mayor control sobre las actividades de las organizaciones sin fines de lucro en Argentina.

Es necesario que se lleve a cabo una investigación exhaustiva y que se garantice la transparencia y el cumplimiento de las normativas y los requisitos legales en todas las organizaciones sin fines de lucro en Argentina, pero subrayando que en este caso se trata de alguien que ha formalizado sus últimas campañas señalando de corrupción sus rivales. Se subió a un juego en la cual terminó siendo, no solo la peor jugadora, sino una de las más tramposas.