El CEO de Greylock Capital afirmó que el acuerdo alcanzado con los acreedores crea la oportunidad para que la Argentina crezca en los próximos dos o tres años.
El CEO de Greylock Capital, Hans Humes, afirmó hoy que el acuerdo alcanzado con los acreedores crea la oportunidad para que la Argentina crezca en los próximos dos o tres años, al tiempo que advirtió que la negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por un nuevo programa será dura y que se alcanzará un acuerdo con el organismo multilateral.
“No va a haber un flujo de caja negativo que restrinja el crecimiento. Cuando llegue el momento, Argentina logrará confianza en los mercados y podrá recibir dólares sin pagar un rendimiento demasiado alto”, dijo Humes, considerado como uno de los hombres fuertes que participaron en las negociaciones encaradas recientemente por el Gobierno en el tema deuda.
El CEO de Greylock participó esta tarde de un encuentro virtual organizado por Allaria Ledesma y Cía, del que también tomaron parte el economista Emmanuel Alvarez Agis, director de PXQ Consultora y el secretario de Finanzas, Diego Bastourre.
“Tenemos que ver un poco que pasen los próximos meses con el Covid-19, qué pasa con el crecimiento de la economía global y veremos qué pasa en la Argentina pero soy optimista en eso, el acceso a los mercados internacionales depende de cuánta liquidez haya en el mercado global y yo creo que habrá mucha liquidez en el sistema en los próximos meses, años”, dijo Humes.
Humes es uno de los armadores del ACC -Argentina Creditor Committee-, uno de los tres grupos que negociaron con el Gobierno el canje de deuda bajo ley extranjera.
“Hay mucha gente dentro del FMI que no ha tenido buenas experiencias con Argentina Hay un sentimiento negativo dentro del Fondo”, sostuvo Humes respecto a la negociación que deberá encarar Argentina con el organismo multilateral para alcanzar un nuevo programa.
“Sin embargo, la nueva directora (Kristalina Georgieva) y en otros departamentos donde también hay gente nueva, están empujando para negociar con Argentina de un modo diferente que en el pasado. Se ha visto más flexibilidad en el FMI en los últimos meses que en el pasado”, dijo y admitió que “al final el FMI sabe que necesita tener un acuerdo con la Argentina y viceversa: entonces habrá un acuerdo”.
Humes aseguró que “al final fue una ventaja que cayeran tanto los mercados porque dio espacio para negociar”.
Aseguró que en el canje de 2005 “la actitud de Argentina era mucho más agresiva contra los acreedores”.
Reconoció que “la ventaja que tuvo el gobierno de Alberto Fernández es que hubo dos años de crisis económica antes de las PASO, entonces la gente sentía que iba a haber acuerdo sobre la deuda. La reacción de los mercados daban oportunidad. Yo pensaba que iba a ser más sencillo el proceso pero llegamos a un acuerdo”.
“La ventaja del acuerdo actual es que deja mucho espacio. Argentina va a tener el tiempo para empezar a crecer en los próximos dos o tres años”, pronosticó.
Aseguró que, en línea con lo que dijo el secretario de Finanzas, Diego Bastourre al comienzo del encuentro, que es muy importante que Argentina desarrolle los mercados domésticos.
Aseguró que “en unos 18 meses va a haber posibilidades de hacer inversiones”, y que habrá fondos internacionales que invertirán en los mercados domésticos antes de que haya emisiones en el exterior.
“Argentina no tiene que pagar mucho más en los próximos años y creo que siempre hay un porcentaje de fondos interesados en invertir en estos mercados porque los rendimientos van a ser altos”, agregó.
“Argentina si llega a un acuerdo con el FMI y resuelve las otras cuestiones, el retorno (tasa de interés) debe bajar y los precios deben subir, Ahora soy muy optimista de que eso va a suceder. Tratar de acceder a los mercados a un retorno de 10% no tiene sentido. Hay que esperar que bajen los precios”, concluyó Humes.