La Oficina Anticorrupción (OA) denunció que el gobierno de Mauricio Macri registró un pago de 704.975.760 pesos por la construcción de 93 jardines de infantes en distintas provincias, pero que nunca fueron terminados.
La denuncia se efectuó a raíz del pago por 93 jardines de infantes que nunca se finalizaron, pago que fue registrado pero cuyo destino real aún se desconoce.
Según afirman, las obras se abandonaron y la administración del exministro de Educación Alejandro Finocchiaro no cobró multas ni reclamó el dinero por incumplimiento de los contratos, que fueron parte del “Plan Nacional 3000 jardines”.
Además, el actual ministerio de Educación, a cargo de la gestión de Nicolás Trotta, descubrió que el pago implicaba sobreprecios: el metro cuadrado se llegó a pagar 1.498 dólares, una cifra que implica el doble que se establece en el valor de mercado.
Ahora, la Oficina Anticorrupción exige que se desarchive la causa del juez federal Ariel Lijo por este tema, dado que hay nueva información.
La denuncia fue originalmente hecha por Margarita Stolbizer, que detectó que se habían empezado a construir 105 jardines, pero solo terminaron 14 (que tampoco eran nuevos establecimientos, sino aulas construidas sobre jardines ya existentes).
Stolbizer también percibió que la primera licitación había sido convocada para 100 jardines pese a que un decreto de 2017 establecía una tanda de 500, que las obras no avanzaban y que las constructoras obtenían prórrogas.
En cuanto a los motivos del supuesto (y excesivo) pago que culminó en ningún destino, puede tratarse de lavado de dinero, de corrupcicón directa, o de extrañas inopercancias.
Lo cierto es que la misma oficina que el Gobierno anterior había inaugurado con fines de persecución política, ya ha encontrado varias fallas en su propia gestión.
