Trabajadores de la estancia de Joe Lewis apedrearon a los integrantes de la séptima Marcha por la Soberanía.
Las organizaciones sociales que participan de la séptima Marcha por la Soberanía a Lago Escondido denunciaron que peones del magnate Joe Lewis los atacaron con gas pimienta, piedras y escombros para impedir su paso por el Camino de Tacuifí, la principal vía de acceso al lago. Las imágenes publicadas por la Fundación Interactiva para la Cultura del Agua, uno de los movimientos convocantes, expusieron las heridas que sufrieron muchos de los participantes.
“Organizaciones sociales y la prensa se posicionaron, antes del mediodía, detrás de la entrada de Tacuifí y fueron amedrentados con gas pimienta, mientras los organizadores buscaban respuestas por la clausura del camino público”, advirtieron sobre el comienzo del ataque. Y continuaron: “Más tarde, los trabajadores de la estancia del súbdito británico volvieron a reaccionar de forma violenta, esta vez con piedras y escombros”. Entre los presentes también estuvo el diputado nacional del Frente Todos Daniel Gollan.
La marcha, que integran organizaciones como la CTA Autónoma, los sindicatos ATE, UnTER y organizaciones sociales como FeNaT y la CCC, y partidos políticos como UP, PTP y PCR, reclaman el libre acceso al lago en el marco de la Constitución Nacional. Mediante un comunicado denunciaron que “la Policía y un enrejado impidieron su paso a Lago Escondido” y afirmaron que “los verdaderos usurpadores de la Argentina son los Lewis, los Benetton, los Zorreguieta”.
La Justicia rionegrina ratificó la orden de abrir el camino Tacuifí para acceder al lago Escondido mediante un fallo firmado el último 22 de septiembre por la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de Bariloche.
Más tarde, la gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, defendió el accionar de la policía provincial y destacó que buscó cuidar “la integridad de las personas y de los bienes”. En diálogo con Télam, puntualizó: “Ese es nuestro rol. Cuidar la integridad de las personas y de los bienes”.
El paso de los manifestantes fue impedido por una gruesa reja, mientras intentaban avanzar a través del sendero que conduce al Lago. Además, los barrotes del portón fueron untados con grasa de camión y se pusieron alambres de púa con el objetivo de impedirles el ingreso.
En medio de los forcejeos, que tuvo el intento previo por derribar el rejado con piedras y hasta con una amoladora, uno de los manifestantes resultó herido en su rostro a raíz de un piedrazo de los peones de Lewis. Unos 25 se encontraban montados a caballo y otros a pie, con rebenques, gomeras y gas pimienta que llegaron a tirar desde el portón.
“Nosotros no somos violentos, nos organizamos y movilizamos en paz, con el objetivo puesto en la apertura al público del grueso portón que está instalado en el comienzo del Camino del Tacuifí, la defensa del Lago Escondido y de la soberanía Nacional”, indicó Julio César Urien, titular de la Fundación Interactiva Para Promover la Cultura del Agua (FIPCA).
Las dos columnas de manifestantes que se hicieron presente en las orillas del Lago Escondido lo hicieron para denunciar que Lewis tiene un “enclave británico”. “Funciona como la cueva de un poder mafioso que busca condicionar la democracia”, sostuvieron los organizadores.
En el lugar de la represión, apareció una persona que aseguró ser abogado y representante legal de Joe Lewis y los vecinos. El sujeto reiteró que querían paz, aunque advirtió que buscan una resolución definitiva de la Justicia para que el tránsito sea público.
El Destape habló con la exdiputada del Frente de Todos y expresidenta del INCAA, Liliana Mazure, quien brindó detalles desde el lugar del hecho sobre la dura represión. “El compañero al que le pegaron fuerte del lado de adentro es Gastón Harispe. Había entrado por otro camino que nosotros desconocemos cuál es y no lograron salir”, indicó refiriéndose al presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Parla Sur.
También hizo hincapié en aquellas personas que fueron por la montaña y no pudieron atravesar el lago “porque los interceptaron en la mañana y quedaron del otro lado”. Y agregó que no tienen dinero suficiente para volver por la montaña, motivo por el cual hay una camioneta de Gendarmería que está dispuesta a entrar y sacarlos. “No los están dejando entrar”, dijo, mientras precisó que hay gente que los está tratando de liberar. “Primero tiraron gas pimienta y piedras. Hubo un grupo que entró por otra puerta y estaban intentando salir por la puerta de Tacuifí. Los sacaron con los caballos, les pegaron y los encerraron en un galpón. Estamos tratando de sacar a esos compañeros”, relató.