Lerner: “Con un Estado presente y una sociedad organizada se puede ser optimista”

Luego del primer fin de semana de flexibilización de la cuarentena en la Ciudad de Buenos Aires, donde los niños/as y adolescentes pudieron salir a pasear durante una hora, el secretario de Niñez, Adolescencia y Familia del Ministerio de Desarrollo Social, Gabriel Lerner, dijo que “en términos generales fue una experiencia satisfactoria”.

Por Silvia Caputo

A dos meses del aislamiento preventivo social y obligatorio a causa de la pandemia del coronavirus, en la Ciudad de Buenos Aires el Gobierno porteño permitió la salida recreativa de niños y niñas y adolescentes lo que según Lerner, “en términos generales, desde el punto de vista de los niños/as y del cumplimiento del distanciamiento social, salvo algunas excepciones, fue una experiencia satisfactoria”.

“Si bien no estamos en condiciones de evaluar si la salida tiene algún impacto epidemiológico, ya que eso corresponde al área de salud, en la medida en que no ocasione complicaciones desde el punto de vista del contagio, es muy importante que puedan tener salidas recreativas porque los ayuda a transitar con un grado mayor de bienestar psíquico y emocional las restricciones”, analizó.

AT: -¿Cuál fue el resultado de esta experiencia?
GL: -En la capital, si bien vi alguna noticia de algún lugar donde se juntaba algún grupo de papás y mamás con los niños/as, en regla general me parece que el cumplimiento ha sido ordenado. Quizás si la idea era que sólo fueran los fines de semana para evitar que se cruzaran las salidas con la actividad comercial, los sábados debió haberse planteado desde las 14 en adelante.
Lo otro que quizás podría mejorar las salidas sería que en los barrios que se puedan cortar algunas calles se haga, para que las caminatas se puedan hacer sin que haya aglomeraciones de gente, y se dispongan avenidas con espacios más amplios.
El balance en las provincias fue el mismo. Hasta el fin de semana pasado se habían realizado en seis jurisdicciones y todo indica que han sido positivas y no ha habido situaciones de desbordes ni desorden, y se mantuvo la distancia social.

AT: -¿Qué tienen que esperar los chicos/as y adolescentes ahora? ¿Habrá nuevas flexibilizaciones?
GL: 
-Estamos en el medio de una situación cuyo escenario siguiente es difícil de predecir. A la conducta de nuestro Gobierno vemos que se le suma una sociedad organizada donde la conducta que vemos en los niños/as y adolescentes es de un gran entendimiento por lo que somos optimistas.
La cuarentena nos restringe, nos limita, nos provoca angustia, ansiedades. Todos, y en particular los chicos/as, tienen afectaciones en sus necesidades y derechos La política pública apunta a atenuar y reducir ese impacto negativo.

AT: -¿Cómo se logra eso?
GL: 
-Primero, acompañando, con un Estado presente. Nosotros partimos de la base de que la respuesta del Gobierno es dura en términos de restricciones de movimiento, pero al mismo tiempo sabemos que es una respuesta racional y adecuada. En ese contexto, reconocemos que los niños/as y adolescentes son los que más padecen esta situación y pensamos acciones para acompañarlos tanto en lo educativo como en lo asistencial con las distintas líneas del ministerio.

Además desde el primer día estamos trabajando con otros ministerios como el de Salud, el de la Mujer, el de Educación, y también lo hacemos con el Consejo Federal de la Niñez, y con las provincias. A la vez, estamos coordinados con organizaciones como Unicef, y distribuimos materiales para promover la recreación y el juego en el hogar, así como guias para los chicos y sus familias de acuerdo a las diferentes edades.

AT: -¿Hay algo positivo que puedan sacar los chicos/as de esta situación?
GL
:- Puede ser que haya experiencias positivas y nuevos aprendizajes pero yo no tengo una mirada ingenua ni romántica de la cuarentena. Ese discurso de que nos da oportunidades maravillosas… me parece ilusorio. Los chicos se ven limitados en sus actividades, en la capacidad de jugar, en el trato con sus pares. Afortunadamente tienen una enorme capacidad de adaptación para transitar este momento y yo tengo confianza en que las estrategias que vamos desplegando sean exitosas y se puedan dejar atrás las restricciones en la medida en la que las condiciones sanitarias lo permitan.

AT: – ¿Cómo influye el aislamiento según las edades?
GL:
 – En los niños de hasta 3 o 4 años vemos que no entienden demasiado esto de no poder salir a la calle. En cambio, los que están en edad escolar se encuentran en pleno proceso de socialización y compartir espacios con amiguitos y compañeros es muy importante. Por eso, las explicaciones de los adultos ayudan mucho.
En cuanto a los/las adolescentes, vemos que algunos han tomado como recurso el de permanecer despiertos durante más tiempo a la noche, conversando con sus pares a través de las pantallas, como un recurso para preservar su autonomía.
También pueden ser propensos a entrar en estados de angustia o depresiones por lo cual la presencia cercana y la escucha atenta de los mayores se vuelve fundamental.

AT: – Del intercambio con los chicos/as ¿qué balance pueden hacer a dos meses del establecimiento de la cuarentena?
GL: 
-Hemos observado que ellos no son solo víctimas de la pandemia sino también protagonistas del cuidado. Los mensajes, las opiniones que recibimos y que recolectamos a lo largo del país con Paka Paka, así como las charlas que tenemos con ellos en forma virtual, lo demuestran ya que han incorporado muy fuertemente la idea del autocuidado y ayudan incluso a sus propios padres a no exponerse.
Otros indicadores que tenemos en el país son los que recolectamos a través de la línea 102 para denuncias que está presente en 17 provincias y tenemos otras 7 líneas en el resto de las juridiscciones. Allí se han incrementado la cantidad de consultas, muchas de las cuales antes se canalizaban a través de las agencias estatales o las escuelas que ahora no están funcionando.
Las inquietudes se duplicaron en diversos lugares y ahora además de recepcionar denuncias sobre violencia o maltrato también se recepcionan preguntas sobre regímenes de visitas durante la cuarentena, o traslados, y temas educativos.

En este último punto, trabajamos con el plan Seguir Educando -que se emite a través de la Televisión Pública, Radio Nacional y Paka Paka- que tiene un ida y vuelta con las familias porque otra de nuestras premisas es tener una comunicación directa entre ellas y el Estado a fin de promover el buen trato que apunte a atenuar las consecuencias del encierro, así como las líneas telefónicas para orientar y ayudar.

Otro elemento que tuvimos en cuenta es el de promover que los niños/as tienen derecho a recibir cuidado por ambos progenitores y por eso, en los contenidos educativos se tiende a no reproducir el esquema tradicional de los roles estandarizados, basado en la condición de género.

Además, desde nuestra Secretaría de Niñez se realizaron transferencias presupuestarias de la Nación a las provincias para mejorar la calidad de atención de niños/as en hogares convivenciales y de adolescentes en centros de infractores a la ley penal. Allí también se distribuyeron guías de prevención y abordaje del Covid-19 para niños, niñas y adolescentes alojados en hogares de protección y en centros de jóvenes en conflicto con la ley elaborados con el ministerio de Salud y Unicef.

AT: – ¿Cuáles son las principales inquietudes, tanto de los chicos como de los grupos familiares?
GL:
 -Surgen distintas cuestiones. Tenemos reuniones periódicas con organizaciones por los derechos de la infancia que miden la incidencia de las políticas públicas. Habíamos tenido una reunión presencial en Buenos Aires con grupos de adolescentes y luego en forma virtual seguimos con chicos y chicas de Jujuy, Tucumán, Mendoza, y Gran Buenos Aires. Ahí aparece la demanda del derecho a tener una adecuada conectividad ya que por ejemplo en muchos casos, en una sola casa hay una computadora o un teléfono para cuatro personas.

Esto genera un cuello de botella. Entonces aparece la preocupación por la pérdida del año lectivo y otros temores. No obstante, también hemos auxiliado con la distribución de millones de cuadernillos educativos para diferentes niveles, y en particular lo hicimos en barrios populares.

En síntesis creo que estamos en una situación excepcional y no hay manuales para abordarlo, por eso es fundamental tener la cabeza muy abierta y realizar un trabajo articulado con todas las áreas de gobierno, las provincias, los municipios y con las organizaciones sociales.

Fuente: Telam