La movilización fue convocada por la madre de la joven a un mes de su desaparición. Exigen “verdad y justicia” tras la detención preventiva de los acusados.
Este domingo se llevó adelante una nueva movilización por Cecilia Strzyzowski, la joven vista por última vez el 2 de junio y por cuyo femicidio hay siete detenidos con prisión preventiva. La movilización pretende unir las provincias de Chaco y Corrientes.
Gloria Romero, la mamá de la joven, encabeza desde pasado el mediodía la marcha en el puente que une las provincias, donde se están colgando cintas, pañuelos, globos y carteles de color rosa con el fin de inundar ese paso del color preferido de Cecilia.
La concentración que exigiendo “verdad y justicia” comenzó alrededor de las 14.30 en la rotonda de Barranqueras y desde allí avanzan hasta el puente, donde se concentran con las “madres del dolor” de Corrientes.
Gloria Romero, en diálogo con el canal de noticias C5N, se refirió a las prisiones preventivas dictadas por el Equipo Fiscal Especial (EFE) el jueves pasado y dijo que “por lo menos están presos, pero están con Internet, con televisión, con celulares”, y dio a entender que deben ser trasladados a una cárcel común.
“Cada vez que yo veo el tema de lo que buscaba mi hija en Google, y lo que buscaba él (César Sena) en Google, te das cuenta de la impunidad que tenía”, manifestó la madre de Cecilia, a las consultas que presuntamente realizaba el marido de su hija, como “qué pasa con el alma del ser querido que muere de forma violenta”, o “muertes violentas qué pasa con el alma”, “almas de personas asesinadas”, “mente de un asesino” y “un asesino siente remordimiento”, entre otras. En ese sentido, agregó: “Ella era la vida y él es la muerte”.
“Ella era una chica que no vivió su adolescencia y no vivió su primera juventud, porque yo tuve un accidente y se hizo cargo de todo, de la hermana, fue madre, fue hermana, fue enfermera, fue todo. Se tuvo que hacer cargo de un negocio, siendo muy chiquita, se tuvo que hacer cargo de una madre paralítica, se tuvo que hacer cargo del estudio de una hermana, entonces era un adulto en un cuerpo chiquito”, relató Gloria.
Luego, contó que “a los 25 años ella recién empieza ella a tener novios, a tener amigos, a salir; mientras tanto, lo único que hacia ella era trabajar”.
“Ella nunca tenía tiempo, la invitaban a salir y ella decía ´no tengo tiempo´, porque tengo que hacer horas extras para poder pagar el alquiler de su hermana, porque su hermana era su orgullo”, señaló emocionada la mujer.
En tanto, descartó que el crimen de Cecilia se cometió en solo en un contexto de “violencia de género”, ya que “no hubieran inventado el viaje (a Ushuaia)”.
“Quieren echarle la culpa a César, quieren sacrificar a César y hacerlo pasar como que estaba loquito y que en un momento de locura la mató, pero no, estos la mataron por otra cosa, estoy segura de que mi hija estuvo en el lugar equivocado y en el momento equivocado, que vio algo que no tenía que ver, o que supo algo que no tenía que saber, o que no se prestó a algo que no querían, la eliminaron porque les molestaba”, aseguró Gloria.
Por último, dijo que “nadie movía un solo dedo, nadie pestañeaba si Emerenciano (Sena, el padre de César) no lo autorizaba, pero ahora lo quieren dejar limpito, el es inocente, no vio nada, no estuvo en la casa, no pasó nada”.
Los fiscales que investigan al femicidio de Cecilia Strzyzowski consideraron a los integrantes del denominado Clan Sena como los coautores del crimen de la joven de 28 años y al resto de los imputados encubridores del asesinato.