Las trabajadoras de casas particulares vuelven a salir a las calles para reclamar un sueldo digno, que no las deje en la indigencia cuando en realidad dedican muchas horas al cuidado de hogares.
El Sindicato de Trabajadoras de Casas Particulares (SiTraCP) nació en plena pandemia ante una necesidad básica: comer. El reclamo de quienes limpian, ordenan, cuidan los hogares de otras familias es más que legítimo porque resulta que, aunque tengan un puesto de trabajo, no tienen un sueldo que les permita alimentar a las bocas de sus casas. Muchas mujeres que son trabajadoras de casas particulares necesitan ir a comedores comunitarios porque el salario mínimo que se les otorga no alcanza para la canasta más elemental. Organizadas y en la calle, las trabajadoras lograron algunos parches en sus ingresos pero continúan insistiendo en que merecen un aumento del 100%.
Y sobre eso habla la secretaria general del sindicato, María del Carmen Díaz: “En noviembre se cobró la última cuota del aumento de 36% y hoy venimos a plantear que nos incluyan en la discusión salarial. La situación de las trabajadoras de casas particulares es desesperante, la escalada inflacionaria pulverizó el último aumento en cuotas y ya perdimos un 20% de poder adquisitivo. No se puede vivir con un sueldo mensual de $60.500 y por hora de menos de $500″.
La mujer que terminó siendo cabeza de la organización sindical planteó que “mientras el Gobierno mantiene el rumbo de ajuste marcado por el acuerdo con el FMI, la mayoría de las trabajadoras estamos en la informalidad y el gobierno establece salarios por debajo de la línea de indigencia”.
“Desde SiTraCP nos movilizamos al Ministerio de Trabajo para volver a plantear el aumento de emergencia del 100%, salario igual a la canasta familiar y un bono sin exclusiones a diferencia del último IFE que dejó afuera a millones de trabajadores precarizados. Queremos que nuestro Sindicato sea admitido en la Comisión de Trabajo en Casas Particulares en defensa de un millón y medio de trabajadoras de casas particulares que son hambreadas por el gobierno y los sindicatos patronales”, concluyó respecto de una protesta que llegará este mediodía de jueves a las puertas del ministerio dirigido por Kelly Olmos.
