La comunidad Nahuelpan de Esquel, en la provincia de Chubut, realizó está mañana una acción de visibilización de la situación que viven acosados por la Policía al servicio de los terratenientes, y lindando con un basurero a cielo abierto.
La estación Esquel de la Trochita amaneció este lunes con una manifestación mapuche que retraso media hora su partida. Decenas de turistas que esperaban hacer el recorrido de escasos 38 kilómetros que realiza el tren turistico, se encontraron con la denuncia de la comunidad Nahuelpan en plena estación. El recorrido del tren atraviesa territorio de la comunidad, pero la realidad del pueblo mapuche es invisible desde el tren en movimiento.
Mientras la pequeña locomotora a vapor humeaba, miembros de la comunidad sostenían carteles que mostraban el basurero municipal instalado en 2010 en inmediaciones de la comunidad.
“Es una vergüenza que hagan esto de turismo cuando está todo contaminado. Y que nuestras lamien (hermanas) tengan que vender torta fritas para vivir. El municipio de Esquel tiene una responsabilidad muy grande con la comunidad Nahuelpan, que es una de las comunidades históricas. Yo vivo en Lepa, pero la responsabilidad nuestra es apoyarnos entre todos” dijo María Luisa, madre de Gonzalo Cabrera, el joven baleado junto al asesinado Elías Garay en la Lof Quemquentrew a manos de supuestos sicarios del terrateniente Rolando Rocco.
“Estamos sufriendo hace más de diez años con la planta de residuos que ha sido la destrucción total de la comunidad. En 2010 comenzó este problema y hemos tenido promesas que no se cumplieron. Hemos tomado está decisión para pedir al gobierno que se ponga a cumplir con nuestra comunidad. Ni es solamente historia, merecemos el respeto como comunidad. La planta fue instalada de manera inconsulta”, remarcó.
Ha sufrido muerte de animales y la acumulación de plásticos en el cerco ha significado que con el viento estos se caigan. “El mismo gobierno nos está queriendo arrastrar para los pueblos cuando nosotros somos gente de campo. Nos matan los animales, las ilusiones nos sacan los hijos que tienen que emigrar” decía con tristeza y con orgullo y determinación a sus 75 años.
En el marco de la actual crisis hídrica en la provincia, evidenciada en la laguna Esquel completamente seca, la comunidad sufre lo peor de sus efectos. “Somos los más perjudicados por la sequía. No estamos lejos de pedir al municipio que nos traiga agua. A mí se me secaron dos lagunas luego de la instalación de la planta. Ya no hay vertientes. Hoy nos salva que tenemos algunas perforaciones. Este año no tenemos agua ni para bañarnos” agregó, por su parte, Felipe Suárez en diálogo con LIQ.
Pese a haber realizado una denuncia en juzgado federal de Bariloche respecto al basurero, la comunidad no ha recibido ninguna respuesta. Las cámaras de los turistas y su solidaridad, son un canal hoy para difundir y dar a conocer lo que los grandes medios, partidarios de la brutal campaña de criminalización de la protesta y en particular de la lucha mapuche, ocultan.
La destrucción de la vida rural, la preeminencia de terratenientes como Paggi, y de grandes latifundistas como Benetton, en las políticas de los sucesivos gobiernos están llevando al despoblamiento de las zonas rurales, no porque no haya alternativas de desarrollo, sino porque no existe ningún tipo de apoyo a crianceros y campesinos.
El cierre de escuelas rurales, de cercamientos indiscriminados y de desalojos forzados avalados por la justicia y el Estado, no pueden acallar la realidad que la comunidad Nahuelpan evidenció hoy en la estación Esquel.