Por: Quimey Cuesta
Según un estudio realizado por USINA el 42% del electorado torcerá el rumbo de las elecciones en octubre.
La Argentina vive tiempos de transformación. O al menos, las últimas elecciones (PASO) ha dejado heridos y contusos en las principales fuerzas nacionales. Ha emergido un nuevo actor desde la grieta al grito de Libertad, palabra que tiene especial significante en nuestra cultura y sociedad. Sin embargo, nos preguntamos qué implicancia tiene el liderazgo personalista de Javier Milei y cómo contrasta con la voluntad del electorado en Gobernación e Intendencias. Notas de un electorado que emerge como decisivo de cara a Octubre.
Una encuesta presencial, dato relevante, realizada por USINA, un think tank criollo, en el Conurbano Bonaerense arroja luz sobre un fenómeno electoral apasionante: la mayoría de los ciudadanos entrevistados tienen claridad sobre su voto tanto para la categoría presidencial, provincial y municipal. También subraya un sorprendente desajuste entre las preferencias electorales de amplios sectores de la población y las estrategias de campaña implementadas por las principales fuerzas políticas, entre ellas Unión por la Patria (UxP) y Juntos por el Cambio (JxC).
¡Vamos a los números! El 19% de los encuestados se muestran dispuestos a cortar boleta, es decir, respaldar a candidatos de diferentes partidos para presidente y gobernador. Mientras que el 23% prefiere una boleta corta, indicando su elección para gobernador, pero no para presidente. Aquí, se revela un notorio desacople entre la oferta y la demanda electorales, y esta combinación afecta el 42% del padrón electoral general. Una cifra que adquiere mayor relevancia sí también se consideran las elecciones municipales. Esto se vio en las PASO, muchos son los municipios donde el localismo ganó, pero esa tracción de voto no se vio representada ni en gobernación ni para presidencia.
No se debe pasar por alto el hecho que, según los datos disponibles, las figuras disruptivas emergen como los principales beneficiarios del voto desacoplado, tanto en la modalidad de “boleta corta” como en el “corte de boleta”. Entre aquellos que manifiestan su intención de cortar boleta, la mitad está inclinada a respaldar la candidatura de Javier Milei a la presidencia, además de un referente de UxP, como Axel Kicillof o en menor medida un representante de JxC para la gobernación.
La existencia de esta discrepancia sustancial entre la oferta y la demanda electoral en los niveles mencionados lleva, según el informe, a tres conclusiones destacables:
Primero: Aunque es posible que el nivel de corte de boleta en la práctica sea diferente al indicado en la encuesta (cortar boleta en un cuestionario es más sencillo que en el cuarto oscuro), es muy probable que veamos un número significativo de cortes de boleta en las elecciones de octubre. Es difícil que los estrategas de campaña puedan persuadir al 20% dispuesto a cortar boleta para que no lo haga. Aquí tendrá un rol determinante en como “jueguen” los intendentes, si entregan su boleta sola (beneficiando al candidato libertario) o si por el contrario, apuestan a la representatividad de la boleta completa (Presidente, Gobernación e Intendentes)
Segundo: El apoyo a una figura disruptiva, como Javier Milei, no necesariamente debe interpretarse como un voto antisistema. A pesar del discurso radicalizado de los libertarios, una parte considerable de la base electoral de Libertad Avanza no ve contradicción alguna en votar tanto a Milei como al actual gobernador y a muchos intendentes en funciones. El comportamiento del segmento de “boleta corta” será fundamental en esta elección.
Tercero: Si prevalece el efecto arrastre (es decir, si optan por tomar la boleta completa de Javier Milei), el partido Libertad Avanza crecerá innegablemente y disputara competitivamente en todas las secciones; mientras que, si eligen cortar boleta, aumentarán las posibilidades de Axel Kicillof para retener la provincia.
En este escenario nos preguntamos: ¿Es probable un gobierno nacional con Javier Milei en el máximo poder ejecutivo, Axel Kicillof en la provincia de Buenos Aires y Jorge Macri en la Ciudad?
El desarrollo económico en las próximas semanas será clave. ¿Cómo estará el bolsillo de los argentinos? ¿Será suficiente las medidas anunciadas por el Gobierno para palear la inflación?.
Veremos como será el tono de campaña que adquiera cada uno de los candidatos, Javier Milei y Sergio Massa ya se eligieron mutuamente como fuerzas para competir en un eventual balotaje, en ese sentido Patricia Bullrich ha quedado relegada a un lugar de mucha incomodidad sin un discurso claro al cual apelar.
Un nuevo actor a emergido en la Argentina, no es Javier Milei, es el desgaste de las instituciones y del poder político representativo tal como lo conocemos, eso se define en Octubre.
El futuro electoral, económico, y político de Argentina está en juego y la incertidumbre es palpable.