Trabajadores de la salud porteños pedían que se los considere profesionales de la salud y sufrieron la represión de la Policía de la Ciudad.
En la Ciudad de Buenos Aires hubo una brutal represión por parte de la Policía de la Ciudad a trabajadores y trabajadoras de la salud que pretendían entregar un petitorio en la Legislatura Porteña, en reclamo de ser considerados profesionales de la salud, mejoras en sus sueldos, condiciones laborales y equipamiento en el marco de la pandemia de coronavirus covid-19.
Lo llamativo es que es la primera manifestación que la Policía de la Ciudad decide reprimir. El domingo, sectores de la oposición de Juntos Por el Cambio convocaron y participaron de una nueva manifestación en el Obelisco contra las medidas del gobierno de Alberto Fernández. En esa, y en las movilizaciones anteriores, la administración porteña -parte de la oposición nacional- decidió respetar el derecho a la protesta, pese a que está prohibido movilizar en el marco de la pandemia.
Los banderazos fueron moneda corriente a lo largo de la pandemia, por diversos motivos: El rechazo a la reforma judicial, el rechazo a la intervención de Vicentín, e incluso el rechazo a la cuarentena impuesta por el Gobierno para frenar los contagios de la pandemia. También hubo importantes manifestaciones de la Policía Bonaerense, pese a que no tienen el derecho a la movilización. Ninguna de esas marchas tuvo consecuencias legales ni físicas para sus asistentes, incluso cuando están prohibidas por decreto.
Quienes sí sufrieron golpes y palazos fueron los enfermeros y enfermeras porteñas, la primera línea de combate contra el covid-19, que pretendía entregar en la legislatura un petitorio para que los reconozcan como personal de salud. “Es un reclamo que lleva muchísimo tiempo, porque las enfermeras y enfermeros no son reconocidos como profesionales de la salud”, contó la legisladora del Frente de Todos, Victoria Montenegro al canal C5N.
Además, contó cómo fue el momento de la represión. Según Montenegro, algunos manifestantes “se acercaron a la Legislatura y en un momento quisieron ingresar. Hubo un forcejeo en la puerta con la policía y ahí es donde se generó una brutal represión que por supuesto repudiamos”.
El ministro de Seguridad porteño y vicejefe de la ciudad, Diego Santilli, no brindó declaraciones por lo sucedido. Irónicamente, hoy participó de un acto con el secretario de Justicia y Seguridad, Marcelo D’Alessandro; y con el jefe de la Policía de la Ciudad, Gabriel Berard, en el que reconocieron a agentes de la policía porteña “por el gran trabajo que hacen día a día para ayudarnos a cuidar a cada vecino y vecina”.
Fuente: Infocielo