Los corredores se abrirían desde la capital ucraniana así como en las ciudades de Járkov y Sumy, y serán trasladados por aire a Rusia.
Luego de que los combates frenaran las evacuaciones este fin de semana y aumentaran las víctimas civiles de la invasión rusa, desde el ministerio de Defensa de la Federación Rusa comunicaron que, a partir de este lunes, aplicarían un alto el fuego y abrirán corredores humanitarios en varias ciudades ucranianas. Desde el Gobierno ucraniano consideran la medida como “inaceptable”.
Según indicaron, los corredores se abrirán a las 10 de la mañana, hora de Moscú (700 GMT), desde la capital, Kiev, así como en las ciudades de Járkov y Sumy, y serán trasladados por aire a Rusia. Asimismo, el Gobierno utilizaría drones para supervisar la evacuación. Vale señalar que estas medidas se establecen a petición personal del presidente francés, Emmanuel Macron, según la cartera rusa.
Recientemente, el Estado Mayor de las fuerzas armadas ucranianas dijo que el ejército ruso estaba “empezando a acumular recursos para el asalto a Kiev”, tras días de lento progreso en su principal avance sobre la capital, al sur de Bielorrusia.
Unas 200 mil personas seguían atrapadas en el puerto asediado de Mariúpol, en el mar Negro, tras seis días de bombardeos de las fuerzas rusas que han cortado el suministro de comida, el agua, la electricidad y la calefacción, según las autoridades ucranianas.
En ese contexto, alrededor de la mitad de los 400 mil habitantes de la ciudad portuaria debían ser evacuados este domingo, pero no sucedió. Por segundo día, el plan de cese del fuego se derrumbó al acusarse mutuamente de no detener los disparos y los bombardeos. Al momento, el número de civiles muertos en en toda Ucrania desde que Rusia lanzó la ocupación asciende a 364, incluidos más de 20 niños, según dijo el domingo Naciones Unidas, que añadió que había cientos de heridos.
El Gobierno ucraniano rechazó como “inaceptable” el plan ruso para crear corredores humanitarios este lunes y evacuar a la población civil de Kiev, Mariúpol, Járkov y Sumy, ya que la ruta prevista lleva a los evacuados a ciudades rusas. “En dos ocasiones los rusos bloquearon la apertura de los corredores humanitarios bombardeando la ruta de los convoyes”, escribió en su cuenta de Telegram la viceprimera ministra y ministra para la Reintegración de los Territorios Temporalmente Ocupados, Iryna Vereshchuk.
“Ahora los rusos dicen que pueden abrir los corredores, pero quieren que los civiles se vayan al territorio ruso, lo cual es absurdo, cínico e inaceptable”, añadió.
Por otro lado, el secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, dijo que Estados Unidos había visto informes creíbles de ataques deliberados contra civiles y que los estaba documentando para apoyar una posible investigación de crímenes de guerra.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, advirtió a los rusos que cometieran atrocidades contra la población civil que se enfrentarían a un castigo. “Para ustedes no habrá lugar pacífico en esta tierra, excepto la tumba”, dijo en un discurso televisado por la noche. Mientras se producían protestas contra la guerra en todo el mundo, Ucrania renovó su llamamiento a Occidente para que endurezca las sanciones y también solicitó más armas, incluidos aviones de fabricación rusa.
Por su parte, el primer mandatario ruso, Vladimir Putin, aseguró que quiere una Ucrania “desmilitarizada”, “desnazificada” y neutral, y el sábado comparó las sanciones occidentales “con una declaración de guerra”.