En el marco de la pandemia, una nueva conmemoración del Día Mundial contra el Trabajo Infantil invita a analizar los nuevos contextos que se presentan y a trabajar fuertemente en el abordaje de la problemática, que genera consecuencias severas en la salud y el desarrollo de los niños, niñas y adolescentes.
Si bien la agenda pública se encuentra enfocada casi en su totalidad al coronavirus, es necesario tener presente que el trabajo infantil y el trabajo adolescente desprotegido, siguen siendo problemáticas vigentes en nuestro país, que, de hecho, pueden llegar a agravarse con esta situación.
Como toda pandemia, el COVID-19 afecta en mayor medida las condiciones de vida de los sectores sociales más vulnerados, lo que tiende a generar mayores índices y riesgos de trabajo infantil y trabajo adolescente desprotegido. La emergencia sanitaria y el aislamiento social, preventivo y obligatorio, impactan fuertemente en la situación económica de la población, dando lugar a crisis laborales, que pueden generar una disminución en los ingresos del hogar, fomentando que los niños y niñas realicen tareas para garantizar su propia subsistencia y la de su familia.
En este aspecto, el Gobierno Nacional, en línea con el Plan Nacional para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil y Protección del Trabajo Adolescente, ha tomado diversas medidas que promueven el fortalecimiento del seno familiar, al ser políticas que tienden a mantener el empleo, el ingreso y las unidades productivas. La creación del IFE y el pago extra de la Asignación Universal por Hijo (AUH) y la Asignación Universal por Embarazo (AUE), entre otras, son medidas que impactan directamente en el abordaje de la problemática y ayudan a sostener el ejercicio del goce de los derechos de los niños, niñas y adolescentes en este momento de creciente vulnerabilidad.
Por último, el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, a través de la Coordinación de Políticas de Erradicación del Trabajo Infantil y Protección del Trabajo Adolescente, lanzó una nueva edición de la capacitación virtual “Trabajo Infantil y adolescente: una mirada integral”. En esta edición se hace un enfoque particular sobre la pandemia, y se señala al COVID19 como determinante de trabajo infantil y adolescente. El objetivo es evidenciar cómo el COVID puede impactar en mayor incidencia de trabajo infantil y adolescente al hacer más vulnerable al seno familiar del que son parte los niños, niñas y adolescentes en situación de trabajo, y concientizar sobre algunas situaciones que pueden pasar desapercibidas e incluso acentuar algunos determinantes de trabajo infantil y adolescente.