A siete días de que Sabag Montiel gatillara dos veces en la cara de la vicepresidenta, a metros de su casa, salieron a la luz videos que podrían comprometerlo aún más, a él y a su pareja.
Gracias al registro de las cámaras de seguridad, la investigación accedió este jueves 8 de septiembre a capturas que indican que los imputados Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte se habrían reunido en un local de comidas cuatro horas antes de la agresión fallida a Cristina Kirchner. En otro registro fílmico que se remonta a 4 días antes del atentado, se lo ve al acusado en las inmediaciones de la casa de la titular del Senado, entre la multitud de militantes que la saludaban cuando la vicepresidenta regresaba a su domicilio en Recoleta.
En el local de comidas intervienen 2 sujetos más: se trata de un joven y una mujer mayor que comían en una de las mesas y de pronto dejaron caer un papel al suelo. Con posterioridad, una vez que dichas personas se retiraron del comercio, la novia de Sabag Montiel se aproximó a la misma mesa y tomó el papel en cuestión.
La imputada le mostró el papel a su pareja, quien lo leyó y lo tiró en el cesto de basura. La reconstrucción de la secuencia es analizada por la investigación ya que se plantea la posibilidad de que el papel contuviera un mensaje relativo al intento de asesinato, lo cual validaría la hipótesis de que hay más personas implicadas en el intento de magnicidio.
Luego de que el joven y la mujer de abrigo rojo se retiraron del local, Uliarte se acerca a la mesa que habían ocupado y se agacha para buscar un papel que estaba en el piso. En ese momento, Sabag Montiel, acusado de gatillarle a Fernández de Kirchner, estaba en la caja comprando helados. Uliarte se acerca a su novio y le entrega el papel, que se queda mirando unos minutos. Los investigadores especulan con que la primera pareja le habría pasado un mensaje a los dos acusados del intento de asesinato, por lo que no se descarta la participación de más personas en el atentado.
Por otro lado, una filmación del 28 agosto, 4 días antes de la agresión fallida, muestra a Montiel en las inmediaciones de la vivienda de Cristina Kirchner, cuando la líder del Frente de Todos volvía a su departamento luego de una cena familiar.
Al principal acusado se lo ve detrás de los militantes y seguidores de Cristina, apoyado contra la pared del edificio situado en la calle opuesta, mientras la vicepresidenta saludaba a la multitud. En principio, la investigación analizará si esta visita refuerza la idea de un atentado planificado. Todo indica que podría tratarse de operaciones de “inteligencia” previa, como la utilización de “los carros de copos de algodón simulando vender ese producto”.
También habría estado presente el 28 de agosto Nicolás Carrizo en las cercanías del departamento de Cristina Kirchner. El día viernes posterior al atentado, el individuo brindó declaraciones a Telefé junto con Brenda Uliarte y negó cualquier nexo con el intento de magnicidio, además de remarcar que recibieron supuestas amenazas.
“A ella la amenazaron de muerte. Nos amenazan todo el tiempo. Nos dicen que somos un grupo terrorista. Nazis. Le voy a ser sincero. Los tatuajes son tatuajes. Ese tatuaje ni siquiera es nazi. Nosotros nos vinculamos con una cierta amistad. Hola, ¿cómo estás?, ¿todo bien? Estábamos a full, laburando. Si hablamos de política no me acuerdo. Nosotros no tenemos nada que ver”, advirtió Carrizo en dicho reportaje.
A su vez, los investigadores accedieron a chats de Carrizo y otro miembro del grupo de los copos de azúcar, donde Carrizo habría dicho que la novia de Sabag Montiel “estaba orgullosa de lo que había hecho” su pareja y que por otra parte estaba presente el día del atentado fallido.
Un exnovio de Brenda entregó una prueba que podría ser esenciales
Un exnovio de Brenda Uliarte aportó este jueves a la Justicia pruebas que podrían ser clave. Lucas Ocampo entregó en las últimas horas una bolsa blanca y un paraguas que la joven. La nueva información incorporada a la causa por Ocampo arroja que la joven estuvo además en su casa después del atentado y le pidió pasar la noche en el lugar, un dato que ayuda a completar el rompecabezas de la Justicia respecto a las horas posteriores de Uliarte al intento de magnicidio.
La prueba fue enviada a peritar para determinar la posible presencia de restos de pólvora en esa bolsa, que podría indicar que allí se guardó la pistola Bersa que usó Sabag Montiel para gatillar contra el rostro de la Vicepresidenta, informaron fuentes judiciales.
El exnovio de Uliarte, quien ahora se presentó como testigo, se comunicó ayer con el juzgado federal de María Eugenia Capuchetti para entregar lo que había dejado en su casa la ahora detenida, a una semana del atentado a la Vicepresidenta.
Ante ello, por la madrugada se allanó su domicilio en un operativo a cargo de la Policía de Seguridad Aeroportuaria en el partido bonaerense de San Miguel y se lo trasladó a declarar como testigo a los tribunales federales de Retiro. En su declaración, el joven puso su teléfono celular a disposición, y explicó que Uliarte lo llamó el jueves por la noche para decirle que había estado con el autor del atentado a la Vicepresidenta y le pidió ir a su casa.
Ocampo refirió que él se negó pero que ella fue igual y se quedó a dormir hasta el viernes a las 5 de la mañana, cuando la despertó porque se tenía que ir a trabajar porque no quería dejarla sola en su vivienda. Según explicó, el domingo ella lo llamó para ir a su casa con intención de “explicarle todo” y en ese trayecto quedó detenida. El testigo dijo que no conocía a Sabag Montiel y que Brenda había comenzado a “meterse” en política desde que comenzó a salir con el ahora detenido y acusado de intento de homicidio calificado.