El expresidente será juzgado por el pago de dinero a cambio de silencio para ocultar un escándalo sexual durante su campaña en 2016. Falta designar a otras 12 personas.
En el juicio que sienta por primera vez en la historia de Estados Unidos a un expresidente en el banquillo para un proceso penal, este martes fueron elegidos los primeros seis miembros del jurado para el proceso contra Donald Trump por el pago de dinero a cambio de silencio.
Los abogados interrogaron a los candidatos al jurado -convocados aleatoriamente por sorteo- sobre sus publicaciones en redes sociales, sus posturas políticas y sus vidas personales para decidir si pueden juzgar con imparcialidad al expresidente. Entre los elegidos figuran un profesor de literatura, una enfermera oncológica y un abogado.
De ser declarado culpable, Trump, candidato republicano para las elecciones del 5 de noviembre, podría ser condenado a cuatro años de cárcel. Si el jurado no alcanza un veredicto unánime, se anularía el caso.
Aún se deben elegir a 12 personas más antes de que comiencen los primeros alegatos en el caso en que se acusa al expresidente de falsificar registros de su empresa para ocultar un escándalo sexual durante su campaña de 2016.
En el segundo día de la selección del jurado, los neoyorquinos fueron interrogados durante horas sobre sus posturas respecto a Trump y otros temas, y ocho fueron excusados luego de que dijeron que no podrían ser imparciales o porque tenían otros compromisos. Los abogados de Trump interrogaron a un puñado de personas por sus publicaciones en las redes sociales, y una persona fue excusada por una publicación de 2017 sobre Trump que decía: “¡Enciérrenlo!”.
Varios candidatos al jurado dijeron al juez que creían que iban a poder decidir el caso de manera justa, sin importar sus sentimientos sobre Trump o sus políticas como presidente.
El juicio, que empezó el lunes, coloca los problemas legales de Trump al centro de la reñida campaña electoral contra el presidente Joe Biden. Es el primero de los cuatro casos penales contra Trump que llega a juicio, y podría ser el único que produzca un veredicto antes de las elecciones de noviembre.
Trump observaba en la sala cómo sus abogados instaban al juez a apartar a una posible jurado por una publicación en redes sociales que hizo tras su derrota en las elecciones de 2020. En un momento dado, Trump habló en voz alta y gesticuló mientras el juez interrogaba a la mujer, lo que provocó que el magistrado amonestara al expresidente.
“No sé lo que estaba diciendo, pero era audible y estaba gesticulando. Y hablaba en dirección de la jurado”, dijo el juez Juan Merchan. “No voy a tolerar eso. No toleraré que se intimide a ningún miembro del jurado en esta sala”.
El fiscal Joshua Steinglass hizo referencia directa a la notoriedad de Trump, y les dijo a los candidatos al jurado que no estaba buscando a alguien “que haya estado viviendo ‘bajo una roca’ en los últimos ocho años”. Sólo tienen que mantener una mente abierta, dijo.
“Este caso no tiene nada que ver con las opiniones políticas personales de cada uno, no es un referéndum sobre la presidencia de Trump ni una competencia de quién es el más popular ni sobre por quién vas a votar en noviembre. No nos importa. Este caso es sobre si este hombre violó la ley”, aseveró.
Trump se declaró inocente de 34 cargos de delitos graves por falsificar registros corporativos para suprimir reportes lascivos -y, según él, falsos- sobre su vida sexual durante la campaña de 2016. Antes de entrar en la sala, Trump brevemente se paró frente a una cámara de televisión en el pasillo y repitió sus denuncias de que el juez es parcial en su contra y de que el caso tiene motivaciones políticas.
“Este es un juicio que nunca debió ocurrir”, insistió el exmandatario. Una vez dentro, se le vio hacer un guiño a un empleado de la corte y preguntarle “¿cómo estás?” mientras caminaba por el pasillo. Posteriormente, Trump tomó su asiento en el banquillo de los acusados, al lado de sus abogados.