El presidente de la Nación, Javier Milei, presentó este domingo el Presupuesto 2025 con un mensaje ante el Congreso de la Nación en el que estableció los lineamientos principales de la política económica para el próximo año.
Estos son los principales puntos del proyecto de presupuesto para el próximo año: las proyecciones de inflación, el aumento del dólar, el equilibrio fiscal, la evolución del PBI, la balanza comercial y la recaudación.
1. Inflación en torno al 18,3% para 2025
En el mensaje que acompaña el proyecto de ley enviado por el Ejecutivo a la Cámara de Diputados estima que el año 2024 terminará con una inflación interanual del 104,4%, poco menos de la mitad del dato de 2023 (211,4%).
La inflación de agosto fue del 4,2% y acumula un 94,8% en los primeros 8 meses del año, por lo que para cumplir la meta debería bajar al 1,2% en los próximos 4 meses.
En tanto, para 2025 el Gobierno prevé una inflación del 18,3%, lo que implicaría un incremento mensual, en promedio, del 1,4% a partir de enero de 2025.
En las previsiones oficiales, el Gobierno espera una inflación del 11,6% en 2026 y del 7,4% en 2027.
2. Dólar: se desacelera el crawling peg
El Gobierno estimó que el precio del dólar oficial (que al 16 de septiembre de 2024 es de $ 982, según el Banco Nación) será de $ 1.019,9.
En tanto, para finales de 2025 el cálculo oficial es que el dólar oficial llegue a $ 1.207. Es decir que se espera una devaluación del 18,3% (en la misma línea que la inflación interanual).
Esto implicaría una baja del crawling peg del 2% mensual actual a un promedio mensual del 1,5%. Según un trabajo publicado por la consultora EPyCA (que dirige el economista Martín Kalos), “la señal que se envía es que también la actual tasa de devaluación fija irá reduciéndose, para terminar el año 2025 en torno al 0,6% de suba mensual nominal”.
En tanto, se prevé un dólar oficial a $ 1.347 para fines de 2026 y de $ 1.446 para diciembre de 2027.
3. Nueva regla presupuestaria para definir los gastos
El proyecto de ley enviado por el Gobierno al Congreso establece una nueva regla fiscal por la cual “el Sector Público Nacional deberá obtener a partir del ejercicio 2025 y en todos los ejercicios subsiguientes, un resultado financiero equilibrado o superavitario”.
Esta iniciativa prevé que, en caso de que bajen los ingresos proyectados por el Gobierno en el presupuesto, también deberán recortarse los gastos en igual proporción.
La metodología propuesta por el Gobierno consiste en determinar en primer lugar el pago de intereses de deuda y, a partir de ello, definir el superávit o equilibrio financiero (es decir, los ingresos del Estado menos los gastos y los intereses de deuda). Para ello, el resultado primario (los ingresos del Estado menos los gastos, sin contar los intereses) deberá ser superavitario en la misma proporción que el monto de deuda a pagar.
El mensaje del presupuesto explica que “a partir de allí se calculan las partidas de gasto que tienen ajustes automáticos, como por ejemplo jubilaciones, y se determina el margen fiscal para el gasto discrecional remanente, que se asigna a distintas partidas presupuestarias en función de las prioridades de políticas públicas establecidas”.
Durante su discurso ante el Congreso, Milei explicó que “si los ingresos son mayores a los estimados, el gasto automático podría aumentar en línea con los ingresos, pero el gasto discrecional se mantendrá congelado”.
En esta línea, el Gobierno prevé terminar 2024 con superávit primario de $ 87 billones y un déficit financiero de $ 550 mil millones.
En tanto, para 2025 estimó un superávit primario equivalente al 1,3% del PBI y un resultado primario de equilibrio.
4. Crecimiento del PBI un 5%, tras una caída confirmada para 2024
Para 2024 el presupuesto estima una caída del 3,8% del PBI, lo que marcaría el segundo año consecutivo de pérdidas, luego del -1,6% de 2023.
En tanto, para 2025 el Gobierno estima un crecimiento del PBI del 5%, lo que alcanzaría para recuperar la pérdida prevista para este año.
Para 2026 también se prevé un incremento del PBI del orden del 5% y para 2027 el incremento esperado es del 5,5%.
5. Balanza comercial positiva e incremento de la recaudación
El presupuesto confeccionado por el Gobierno prevé un superávit comercial (la diferencia entre las exportaciones y las importaciones) de poco más de US$ 20 mil millones para 2025, producto de un incremento del 9% en las exportaciones y del 13,4% de las importaciones (que para 2024 caerían más del 20%).
Además, se estima un aumento de la recaudación del 37,6% nominal (frente a una inflación proyectada del 18,3%). Esto se logrará principalmente -según las previsiones oficiales– a partir de una suba en la recaudación de Ganancias (que se reestableció a partir de septiembre de 2024) y de los derechos de exportación.
En tanto, se espera una caída en Bienes Personales -cuyas alícuotas se modificaron– y la eliminación del Impuesto PAIS, cuya vigencia vence a fines de 2024 y su continuidad no fue incluida en el actual presupuesto.