Se cumplen 13 años de la desaparición seguida de muerte de Luciano Arruga

El joven fue secuestrado por la Policía Bonaerense. Estuvo desaparecido durante 5 años y 8 meses hasta que sus restos aparecieron enterrados como NN en el cementerio de Chacarita. Por su caso, solo está condenado el ex policía de la Bonaerense, Julio Torales, por torturas cometidas contra Luciano en 2008.

Por Diego Adur

El 31 de enero de 2009, Luciano Arruga fue desaparecido por la Policía Bonaerense. Sus familiares y amigos lo buscaron incansablemente durante 5 años y 8 meses, enfrentando todo tipo de obstáculos burocráticos y desvíos de la Justicia. Además, recibieron constantes amenazas, escuchas telefónicas y amedrentamiento por continuar reclamando la aparición con vida de Luciano. Casi 6 años después de su desaparición, en 2014, una abogada del CELS (Centro de Estudios Legales y Sociales) solicitó a la Justicia una medida de exhumación de tumbas. Los restos de Arruga fueron hallados en el cementerio de la Chacarita, en la Ciudad de Buenos Aires. Lo habían enterrado como un NN.

Por el caso de la desaparición forzada seguida de muerte de Luciano Arruga no hay ningún responsable preso ni enfrentando juicio alguno. Fue condenado el ex policía de la Bonaerense, Julio Torales, porque meses antes de su desaparición había torturado a Luciano en una cárcel del destacamento de Lomas del Mirador, donde lo tenían prisionero.

Luciano tenía 16 años. Se había negado a robar para la policía y por eso se empecinaron con él. Sufrió reiteradas detenciones arbitrarias, incluida la del 22 de septiembre de 2008 cuando Torales lo torturó. Aquel día, su hermana lo esperaba fuera del destacamento y cuando Luciano salió, vio el penoso estado en el que lo había dejado el policía.

La última vez que su familia lo vio con vida fue el 31 de enero de 2009. Luciano salía de su casa del barrio 12 de octubre, en Lomas del Mirador, La Matanza, para ir a un cyber. Por investigaciones posteriores a la aparición sin vida del cuerpo de Luciano, se supo que ese mismo día el joven fue atropellado por un auto en la Avenida General Paz a la altura de Mosconi. Arruga estaba escapando de la policía y cruzó corriendo la avenida que separa la Ciudad de Buenos Aires con la provincia. Luciano llevaba ropas extrañas que no le pertenecían. Los policías que lo secuestraron y lo desaparecieron quisieron humillarlo hasta último momento.

No hay responsables de la desaparición y muerte de Arruga que estén condenados por ese hecho. La familia recorrió hospitales y todo tipo de establecimientos de salud después de su desaparición y en ninguno lograron hallar al joven. Investigaciones de Familiares y Amigos de Luciano Arruga dieron cuenta que la noche que desapareció el joven, los policías de la zona apagaron su GPS. Así, nunca se supo a dónde estuvieron ni a dónde llevaron a Luciano.

Además, hace años que Familiares y Amigos viene reclamando a la Justicia un jury político contra el juez Gustavo Banco y las fiscales Roxana Castelli y Celia Cejas Martin, quienes tuvieron la causa en un primer momento y frenaron por completo la investigación para saber la verdad sobre lo que pasó con Luciano Arruga. Los acusan de “haber tenido en sus manos la causa por la desaparición de Luciano Arruga durante 4 años sin avance alguno, encubriendo el accionar policial con total impunidad”.

Foto: Lanan

Este sábado 29 se exhibirá la película documental ‘¿Quién mató a mi hermano?’ de Ana Fraile y Lucas Scavino, estrenada en 2019, que retrata la búsqueda incansable de Luciano y el pedido de justicia por su desaparición seguida de muerte. Será a partir de las 19 horas en la Plazoleta Raymundo Glayzer, en Juan Agustín García y Espinosa, barrio porteño de La Paternal. El evento lo organiza La Colectiva Radio.

También, el domingo 30 se realizará un acto homenaje a 13 años de la desaparición de Luciano. Como cada año, será en el lugar donde Luciano fue asesinado: Av. General Paz y Mosconi, a las 18 horas. La marcha señalética es convocada por Familiares y Amigos de Luciano Arruga que para la ocasión enviaron un comunicado: “Han pasado trece años intensos, ambiguos, con avances, retrocesos, un destacamento policial cerrado y recuperado, convertido en un Espacio de Memoria y Derechos Humanos activo, un policía de la bonaerense preso por torturas y múltiples acciones con el objetivo no solo de buscar verdad y justicia sino de visibilizar una problemática estructural y sistemática desde el regreso de la democracia”. El comunicado también señala que en “estos trece años ningún funcionario político responsable del crimen de Luciano ha sido ni siquiera rozado por investigación alguna” y resalta el pedido del juicio político contra el juez y las fiscales de la Provincia de Buenos Aires porque “la causa por la desaparición seguida de muerte avanza a una velocidad que sonrojaría a una familia de caracoles”.